¿Afecta al cerebro el uso de la mascarilla?
Investigadores del instituto ICFO en Barcelona han utilizado tecnologías biofotónicas para comprobar si al ponerse mascarillas se alteran los niveles corporales de oxígeno.
Investigadores del instituto ICFO en Barcelona han utilizado tecnologías biofotónicas para comprobar si al ponerse mascarillas se alteran los niveles corporales de oxígeno.
La Agencia Estatal de Meteorología de España (Aemet) detectó este martes la llegada de dióxido de azufre (SO2) con picos de hasta 20 partes por billón, hasta 400 veces por encima del valor normal en esa zona, a 2.371 metros de altitud.
Un modelo basado en mecánica de fluidos ha seguido la trayectoria de las partículas nocivas en las manos durante su lavado, y los resultados coinciden con lo que recomiendan las autoridades sanitarias: se necesitan al menos 20 segundos de movimiento vigoroso con el agua para retirar posibles virus y bacterias.
En prevención de riesgos laborales, es necesario tener en cuenta que la exposición a sustancias como el óxido de etileno, puede poner en peligro la salud de los empleados. De ahí que se creen protocolos específicos para reducir esta exposición y sus efectos.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha declarado en una sentencia que "la Comunidad de Madrid vulnera los derechos de los médicos de atención primaria y pediatras en materia de integridad física y salud al no haberles dotado de forma completa de los medios y medidas de protección en sus centros de trabajo.
La exposición prolongada a sonidos fuertes -Más de 80 decibelios (dB)- puede, a largo plazo, provocar problemas de audición, como hipoacusia e incluso sordera.
El texto, derivado del decreto de la nueva normalidad del pasado mes de junio, se mantendrá hasta que acabe la pandemia, aunque el Gobierno ha anunciado que el Consejo Interterritorial de Salud revisará los posibles desfases que arrastre la norma por el tiempo transcurrido desde el inicio de su tramitación y las nuevas evidencias.
Las mascarillas se han convertido en un complemento indispensable en nuestro día a día. Desde que el Ministerio de Sanidad las hizo obligatorias en junio del pasado 2020, son muchos los que buscan las más eficaces para evitar el contagio del coronavirus.
El Juzgado de lo Social de Eibar ha reconocido como enfermedad profesional el cáncer de pulmón provocado por la exposición al polvo de sílice que acabó con la vida de un trabajador.
El sindicato ELA ha denunciado ante la Inspección de Trabajo los "graves incumplimientos legales" de la Administración de Justicia del Gobierno Vasco en la prevención del contagio de la sarna ya que, según ha advertido, está "poniendo en riesgo la salud" de los trabajadores y también de la ciudadanía.
El Tribunal Supremo rechaza reducir la indemnización de un trabajador con una enfermedad profesional en los pulmones debido al amianto por el hecho de ser fumador.
CCOO solicita a la Junta de Andalucía que elabore un plan para desamiantar los centros hospitalarios – Hospitales como el Civil, el Regional, el Marítimo de Torremolinos o el centro sanitario de Barbarela son los prioritarios donde comenzar la limpieza.
La Comunidad de Madrid ha iniciado un expediente sancionador contra la Empresa Municipal de Transportes (EMT) tras detectar irregularidades en la acreditación documental de la retirada de amianto en las cocheras de Fuencarral, en noviembre de 2017.
La Fiscalía ha citado a los trabajadores de Metro afectados de asbestosis, enfermedad laboral originada por la manipulación del amianto, así como a los familiares de otros dos operarios con la dolencia reconocida y que fallecieron a causa de la misma.
El juzgado de lo Social número 2 de Toledo ha condenado a la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural a cumplir de inmediato los requerimientos en materia de prevención de riesgos laborales del colectivo de agentes medioambientales que formuló la Inspección de Trabajo en 2013 y que aún no se han acometido.
Un estudio internacional liderado por investigadores de la Universidad de Granada señala que el 90% de los recibos que nos dan en las tiendas y supermercados están elaborados con papel térmico y contienen bisfenol-A, un disruptor endocrino.