Once vidas humanas desde que se ha iniciado el año y 4.405 siniestros laborales entre enero y junio. Este es el complejo escenario que aborda el sector de la construcción ante el fenómeno de la siniestralidad laboral, que, como un goteo que no cesa, sigue al alza en las últimas semanas en la provincia de Alicante.
La situación ha obligado a la Generalitat Valenciana a reunir de urgencia a las tres patronales de la construcción (Fecia, Provia y Fopa) a una cumbre que tendrá lugar el próximo jueves en la sede del Consell en Alicante.
La secretaria autonómica de Empleo, Ana Encabo, confirmó a última hora de ayer la noticia en la inauguración de los primeros cursos que se celebran en el recién construido simulador de riesgos laborales de la construcción que ha promovido la patronal alicantina Coepa.
Aunque los datos oficiales de Empleo sólo abarcan el primer semestre del año, UGT manejaba hace unos días la cifra de 27 trabajadores muertos en el sector en la Comunidad Valenciana, once de ellos en la provincia de Alicante, desde que se inició el año.
A finales de la pasada semana, el director general de Trabajo anunció en un acto con la asociación de trabajadores autónomos un plan específico para atajar la siniestralidad laboral en el sector alicantino de la construcción.
Ese plan se trazará el próximo jueves en la Casa de las Brujas de Alicante, sede del Consell. A lo largo del día de ayer, los presidentes de la patronal de obra pública Fopa, Rafael Martínez Berna; el de los constructores Fecia, Ramón Jerez; y el de los promotores Provia, Francisco Murcia, fueron convocados por la Generalitat.
Nada adelantó ayer la secretaria autonómica de Empleo, Ana Encabo, del plan de actuación para frenar el incesante número de accidentes. «Vamos a empezar a hablar de medidas muy específicas para atajar los accidentes laborales en el sector», se limitó a apuntar Encabo. La secretaria autonómica sólo abundó en que «las medidas que se van a adoptar serán de eficacia inmediata y pretendemos sacar mucho provecho al simulador de riesgos laborales en la construcción de Coepa», añadió.
Sobre la siniestralidad laboral en el sector se refirió ayer el presidente de la Federación de Empresas de la Construcción y Afines de Alicante (Fecia), Ramón Jerez, para quien «la empresa es la verdadera responsable de la formación de los trabajadores y del control de la prevención de riesgos, por lo que no podemos eludir la responsabilidad por negligencias técnicas de otro tipo».
Jerez considera que la Inspección de Trabajo, que está facultada para paralizar una obra por riesgo inminente de accidente grave según la vigente Ley de Seguridad y Salud Laboral, «lo tiene muy complicado, porque la decisión puede hundir a una empresa o porque pueden ser objeto de una querella».
Para precisar y acotar las responsabilidades de todos los agentes que intervienen en la seguridad laboral en una obra, Ramón Jerez exigirá en la cumbre que se celebrará el próximo jueves la urgente elaboración de un amplio mapa de riesgos que delimite y clarifique las posiciones del inspector de trabajo, del empresario promotor y constructor y del arquitecto técnico o aparejador, obligados estos últimos por un decreto de 1971 a «controlar las instalaciones provisionales, los medios auxiliares de construcción y los sistemas de protección, exigiendo el cumplimiento de las disposiciones vigentes sobre seguridad en el trabajo».
«Ese mapa de riesgos, que ya había sido solicitado por Fecia en otras ocasiones, debe respaldar en todo momento a cada uno de los agentes del proceso de construcción y de la prevención de riesgos laborales», explica Jerez.
El presidente de Fecia también se muestra partidario de instalar un sistema bonus-malus consistente en primar desde el punto de vista de las obligaciones fiscales y sociales a los empresarios que cumplan con la ley de prevención de riesgos y en castigar por la misma vía a los constructores que incumplan de forma sistemática los preceptos sobre la seguridad e higiene en el trabajo.
Rentabilidad económica
Según Ramón Jerez, la seguridad laboral es a medio y largo plazo economía para la empresa, aunque realmente cueste mucho dinero en el corto plazo. Sobre las serias inversiones que se realizan en el campo de la prevención de riesgos también se refirió ayer el presidente de la patronal de obra pública Fopa, Rafael Martínez Berna. Este empresario parte de la base de que «la siniestralidad laboral es mala para todos y está claro que en el subsector de la edificación se están registrando más accidentes», afirma.
Martínez Berna asegura que las inversiones son muy elevadas en el sector de obra pública y también en el de la edificación privada y por ello aprovechará la cumbre del jueves para solicitar un incremento del dinero de la Generalitat destinado a combatir este fenómeno. «Se necesita un capítulo específico en los presupuestos generales de la Generalitat para este tema», abunda. El presidente de Fopa aboga porque «nos impliquemos todos en este grave problema, desde el peón hasta el director general de las constructoras».
El director general de Trabajo, Román Ceballos, hizo referencia hace unos días en Alicante a la inversión en esta materia. La Conselleria de Economía y Empleo destinará cuando finalice el año 6 millones de euros a actuaciones diversas en prevención de riesgos laborales. Los sindicatos no han sido convocados. UGT, a través de Juan Francisco Richarte y Manolo Jover, mostraron ayer su sorpresa por esta convocatoria y su malestar por no haber sido invitados a dicha cumbre urgente.
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