Asimismo, el sindicato reclamará que el accidente que sufrió este brigada forestal se considere accidente laboral y no enfermedad común, como se ha determinado hasta ahora, según indicó este miércoles el secretario de la sección sindical de CCOO-PV en T., Juan Francisco Miralles.
El trabajador de T., de 62 años, permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital de Requena, tras verse afectado por el Streptococcus pyogenes, una bacteria conocida como “come carne”, después de sufrir una herida en una mano cuando sofocaba un incendio.
El hombre, que ha sufrido la amputación del brazo izquierdo al extendérsele la infección que contrajo a través de la herida que se hizo en la mano, se lesionó el pasado 13 de septiembre cuando sofocaba un incendio en un vertedero, después de que una manguera le golpeara en la mano.
El secretario de la sección sindical de CCOO-PV en T. comentó que los representantes de los trabajadores han pedido “explicaciones” a la empresa, a través de los responsables de salud laboral, para conocer lo sucedido con este brigada forestal. Destacó la voluntad del sindicato de que el siniestro sufrido por este trabajador sea considerado como “un accidente laboral” y no “una enfermedad común”.
Miralles, que deseó que el trabajador se recupere y salga de este incidente, indicó que sufrió la herida que ha provocado que le amputen el brazo izquierdo cuando sofocaba un incendio en un vertedero. En este sentido, avanzó que CCOO-PV pedirá a través del Comité de Salud Laboral de T. que “se revisen los protocolos” de actuación que han de regir en lugares de trabajo que pueden considerarse “focos contaminantes”, como es el caso de un vertedero, con el fin de que los empleados puedan desempeñar su labor con mayores garantías de protección y seguridad.
Afirmó, de este modo, que entre las propuestas que se plantearán está la de que los guantes que utilicen los brigadas forestales en estos casos sean desechables y que se sustituyan después de cada actuación por otros nuevos. Además, se propondrá que sea la propia empresa la que lave la ropa que los brigadistas usan para trabajar con compañías “especializadas que se hagan cargo de la limpieza”, y que no tengan que ser los trabajadores los que la lleven sus propias casas para ello.
El representante sindical manifestó que lo sucedido con este brigadista y el hecho de que haya contraído una enfermedad por medio de “bacterias que pasan a través de la piel”, lleva a “repensar todo el trabajo” que hace este colectivo de empleados. Así, estimó necesario contemplar “medidas” para garantizar su labor “cuando se trabaja en determinados sitios” que pueden ser considerados “centros de contaminación” o “focos de infección”.
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