Un informe de la Ejecutiva Confederal de UGT denuncia que los trabajadores temporales españoles sufren el triple de accidentes laborales que los que gozan de contratos indefinidos y que esta enorme diferencia aumentó un 30% desde que gobierna el PP.
La principal conclusión del documento, elaborado por el área de Salud Laboral, es que “los sectores y colectivos en los que se concentra el mayor porcentaje de trabajo precario es donde más creció la siniestralidad laboral entre 1996 y el 2000”.
La tasa de accidentes laborales con baja por cada 1.000 habitantes pasó en España de 70,8 en 1996 a 86,6 en el 2000, con un aumento del 22% en el cuatrienio.
La central sindical, con este informe, sale al paso de las declaraciones realizadas recientemente por el Ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, en las que señalaba que España estaba a la cabeza de la UE en cumplimiento de la normativa de riesgos laborales, según un portavoz de la organización. UGT “lamenta” que el ministro “se atreva a frivolizar con este asunto” y le recomienda que repase las estadísticas de su propio ministerio, “que constatan el altísimo grado de incumplimiento de la normativa”. Al tiempo que le recuerda que España sigue liderando casi todos los segmentos de siniestralidad laboral europeos y que “sigue siendo desalentador que más de cuatro trabajadores mueran a diario en el puesto de trabajo y que unos 40 sufran accidentes graves, muchos de ellos con lesiones invalidantes”.
Precariedad en el empleo
El informe divulgado por la Ejecutiva de UGT señala que la subcontratación, la temporalidad de los contratos y la suma de elementos que provocan precariedad en el empleo son los factores determinantes en el incremento de la siniestralidad laboral, “que es consecuencia fundamental de la degradación del mercado de trabajo”.
En apoyo de sus tesis, analiza la relación entre la temporalidad y los accidentes. Los datos demuestran que mientras los trabajadores temporales sufrieron en el 2000 unos 145 accidentes con baja por cada 1.000 empleados, los asalariados con contrato indefinido presentan una tasa en el mismo año de 47 bajas por accidente por cada 1.000.
Además, la tasa empeoró entre 1996 y el 2000 año tras año para los trabajadores temporales, aumentó un 38%, mientras se mantuvo casi invariable para los fijos.
En otro capítulo del estudio se analiza la incidencia de los accidentes entre los empleados menores de 24 años, que son los que soportan una mayor precariedad en el trabajo.
Las conclusiones son que sufren más del doble de bajas por siniestros que los trabajadores de entre 40 y 45 años; que entre 1996 y el 2000 su tasa de accidentes con baja por cada 1.000 empleados del grupo de edad pasó de 92 a 125, con un aumento del 26,4%; y que, pese a ello, los jóvenes con contratos temporales tuvieron entre 1998 y 2000 un 22% más de accidentes que los jóvenes que gozan de empleos fijos.
La construcción, principal sector con siniestralidad
Ser joven repercute en un aumento de la siniestralidad, pero ser joven y contratado temporal la dispara. Los asalariados temporales de menos de 24 años, en el 2000, padecieron el 32% de todos los accidentes con baja de los contratados temporales españoles y acumularon el 80% de los partes de baja de los empleados de su grupo de edad.
Finalmente, el análisis indica que la siniestralidad aumenta igualmente en los sectores económicos que acumulan más trabajadores en precario, con el ejemplo principal de la construcción, donde se suelen reunir los rasgos de subcontratación, temporalidad, y juventud. La construcción registró en el período 1996-2000 un incremento del 77,5% en las bajas por accidente, un aumento del 26% en las lesiones graves, y un crecimiento del 19,5% de los fallecidos en el puesto de trabajo.
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