UGT de León denunció ayer que la «escasez» de medios personales y una indumentaria «inapropiada» provocó que el servicio de extinción de incendios de la Junta de Castilla y León tardara «una hora y media» en llegar al lugar donde se originó un incendio, a diez kilómetros de León, en el que un operario resultó herido leve. Así lo denunció ayer el responsable de Medio Ambiente de UGT en León, José Jiménez, en el balance que realizó de las actuaciones llevadas a cabo en el incendio registrado el domingo las 14.30 horas en Fontanos del Torío, en el que se quemaron ochenta hectáreas de roble adulto y que quedó extinguido a las 21.30 horas
Al respecto, fuentes de la Junta desmintieron que se hubiera acudido con retraso al lugar del incendio, como lo demuestra que «el corto espacio de tiempo en el que quedó totalmente extinguido».
En este incidente, un trabajador del servicio de extinción de incendios, cuyo nombre no fue desvelado, sufrió quemaduras en las manos, según el sindicalista, que indicó, a la agencia Efe, que «este percance, que no fue de gravedad, se produjo porque no llevaba la indumentaria adecuada para apagar el incendio», es decir, no llevaba guantes.
Asimismo, criticó la escasez de medios humanos del que dispone el servicio de extinción de incendios de la Junta, que provoca que «tengan que estar en mil sitios a la vez».
Precisamente, los agentes forestales llevan un mes de movilizaciones para reivindicar a la Junta la contratación de más agentes forestales en la Comunidad, donde trabajan 792, cuando debería haber 1.050, de los que 180 tendrían estar en a provincia de León, donde tan solo hay 150 agentes, según indicó.
Un horario definido y la posibilidad de residir en otra comarca distinta de la que trabajan son otras de las reivindicaciones de los trabajadores del sector, que tienen previsto mantener una reunión ayer con la consejera de Medio Ambiente de la Junta, Silvia Clemente.
Un total de 13 incendios, que afectaron a 132 hectáreas de terreno, se registraron en la provincia leonesa, desde el pasado día 19 hasta el 21 de abril, según fuente de la Junta.
A pesar de lo denunciado por UGT, lo cierto es que el viento y las altas temperaturas registradas este fin de semana tuvieron mucho que ver en el retraso de las tareas de extinción del incendio que provocó una cortina de humo apreciable desde cualquier punto de la capital leonesa, lo que causó la preocupación de los vecinos de las localidades próximas a las capital, quienes vivieron momentos de alta tensión.
El fuego se originó, por causas que aún no han sido precisadas, en las inmediaciones de la ermita de la Flecha, en Fontanos, y se propagó bosque através ayudado por el viento. En un primer momento se temió que el fuego alcanzara algunas de las viviendas ubicadas en Fontanos, lo que se logró evitar.
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