El aire de tres de cada cuatro viviendas analizadas en un estudio de la Unión Federal de Consumidores francesa está contaminado por productos químicos tóxicos, según publica en la edición de enero su revista “Que Choisir”.
De las 885 viviendas analizadas, un 76 por ciento presentaban un nivel de Compuestos Orgánicos Volátiles (compuestos químicos con efectos dañinos para el hombre) superior al umbral de calidad fijado en Estados Unidos y un 54 por ciento estaban por encima del alemán.
Las concentraciones de formaldéhyda -elemento presente en el conglomerado de madera, los suelos estratificados, las pinturas o el papel pintado- eran en un 90 por ciento superiores al límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para las personas sensibles con problemas asmáticos o alérgicos.
La revista propuso a sus lectores en enero pasado hacer pruebas del aire en el interior de sus casas, normalmente en los dormitorios, y 885 se ofrecieron para llevar a cabo la experiencia, que empezó con la toma de muestras.
Estas se sometieron a diversos análisis para detectar la presencia de partículas en suspensión que evidenciaban la presencia de tabaco, hidrocarburos, benceno o compuestos clorados (incluidos en productos de limpieza para el hogar), entre otros.
Esta contaminación de la atmósfera interior “no es en absoluto una fatalidad”, subrayan los autores del estudio, que recomiendan en particular ventilar bien las habitaciones, incluso en invierno, no utilizar aerosoles, que contribuyen a la expansión de productos químicos nocivos, o evitar los disolventes.
En Francia no hay por el momento niveles de seguridad sobre la calidad del aire en el interior de las viviendas, aunque en julio pasado se puso en marcha un “observatorio” para realizar estudios y medir las incidencias de eventuales contaminaciones sobre la salud.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
