El accidente sufrido por un compañero que se salió de la cuerda y su afición a la escalada, llevaron a Juan Carlos Marco Mora a idear un sistema con el que aumentar la seguridad en el trabajo del palmerero. El resultado ha sido un cinturón en el que se fusiona la cuerda tradicional con un conjunto de arneses, que evita la caída del usuario si se resbala.
«Con el sistema tradicional vas dentro de la cuerda sin estar enganchado a ninguna parte. Ahora voy enganchado al arnés, nunca me puedo salir y se alarga o acorta la cuerda según la palmera», afirmaba el inventor, al tiempo que añadía que «es una cuerda que por dentro lleva cinco cables de acero encerado».
En un resbalón «te sales de la cuerda y de este modo el sistema es ideal incluso para los principiantes. Resbalones tenemos a diario. Con el cinturón te podrás dar con el tronco pero al suelo no caes».
Se utilizaría sobre todo para la escarmonda porque también ha ideado otra forma para el encaperuchado: «Hay muchos momentos en los que estamos sueltos, pero con estos sistemas siempre vas a ir sujeto y no vas a ir contra el suelo».
Ya ha realizado la patente del sistema pero para la comercialización y homologación «haría falta una empresa que se interesara. Y puedo decir que pese a que los palmereros más veteranos son un tanto reacios, a los jóvenes les gusta y se sienten más seguros. Nadie tiene por qué jugarse la vida».
El sistema es análogo al presentado hace tres años por Michel Ferry y José Vilella, en el que se utilizan otros materiales. También ha sido patentado pero igualmente precisa que alguien se interese por el proyecto para comercializarlo y ponerlo en el mercado. De momento se ha puesto a disposición del ayuntamiento.
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