La Inspección de Trabajo paralizó la actividad de cuatro de las 585 empresas sujetas a inspección a lo largo del segundo semestre de 2006 en el marco del Plan de acciones prioritarias para la reducción de la siniestralidad laboral en 2006, cuya realización fue acordada por la Comisión Nacional de Seguridad y Salud en noviembre de 2005, según informó hoy el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
Además, los inspectores efectuaron 1.043 requerimientos para obligar a las empresas a solventar las deficiencias detectadas, 157 advertencias verbales y 62 propuestas de sanción.
Las inspecciones previstas inicialmente en 257 empresas se incrementaron al incorporarse 328 nuevas compañías a la lista hasta las 585, lo que supone un 127,6% más. La labor de la Inspección se centró especialmente en la construcción, ya que revisó la actividad de 370 empresas de este sector.
Trabajo aseguró, en este sentido, que “la elección se realizó según criterios objetivos que tenían en cuenta el índice de incidencia total y de gravedad, el número de trabajadores y otra serie de factores”.
Por otro lado, las empresas inspeccionadas registraron 24 accidentes mortales en 2005, de los cuales 22 correspondieron a compañías del sector de la construcción y otros dos 2 al resto.
En cuanto a los accidentes graves, de los 75 registrados, 48 tuvieron lugar en el sector de la construcción, mientras que 27 sucedieron en otros sectores. Asimismo, se contabilizaron 9.136 accidentes leves, 3.461 en la construcción y 5.675 en empresas al margen de este sector.
Los incumplimientos más comunes detectados por los inspectores fueron la no evaluación de riesgos en todos los lugares y puestos de trabajo y la falta de formación de los trabajadores en prevención de riesgos laborales suficientes.
Otras de las faltas se refieren a los casos en los que la empresa no tiene documentado o no ha implantado en sus sistema general de gestión el plan de prevención de riesgos laborales o en los que la planificación de la actividad preventiva no establece los medios humanos, recursos económicos, prioridades y plazos de cumplimiento de las medidas previstas.
El Ministerio también apunta entre estas carencias el incumplimiento o la no adopción de las medidas previstas en la planificación de la actividad preventiva.
En el caso de las empresas del sector de la construcción, Inspección señala que, principalmente, no se dan instrucciones “suficientes y adecuadas” con carácter previo al inicio de las actividades de las empresas concurrentes, ni tampoco se adoptan medidas necesarias para garantizar la utilización por parte de los trabajadores de los equipos de protección individual adecuados.
Por otra parte, el Ministerio destaca que una gran parte de los incumplimientos se debe a que no se exige a las empresas subcontratadas, con anterioridad al inicio de las actividades, que acrediten por escrito la realización de la evaluación de riesgos y la planificación de la actividad preventiva.
Por último, señala que en otros casos no existen recursos preventivos, ni se articulan los medios de coordinación entre las diferentes empresas concurrentes en un mismo centro de trabajo.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
