Un estudio realizado por el Instituto Nacional de Silicosis de Oviedo sobre los niveles de ruido y su repercusión en los trabajadores del sector extractivo de carbón reveló que más del 40 por ciento de los mineros estudiados presentaban problemas auditivos debido a que, en un alto porcentaje de puestos de trabajo, se sobrepasaban los los límites máximos de ruidos.
Sin embargo, combatir esos problemas de salud laboral en las minas no es fácil y ello a pesar de que la legislación cada vez es más rigurosa. Así , por ejemplo, la protección contra ruidos puede ser incompatible con la seguridad porque un minero con protección auditiva podría tener dificultades para escuchar las señales de alarma en caso de emergencia en el interior de la mina.
Por ese motivo, la Consejería de Salud del Principado y el Ministerio de Industria han firmado un convenio de colaboración para llevar a cabo un proyecto de «Implementación de un estudio sobre ruido en una mina subterránea de carbón con vistas a la posterior confección de un documento técnico que facilite la aplicación de la legislación». El estudio incidirá en las dificultades de aplicación de la normativa de ruidos en las minas y se realizará en las instalaciones de la empresa Hulleras de Coto Cortés en Cerredo, en el concejo de Degaña.
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