Los equipos de rescate descubrieron partes de cuatro cadáveres entre los escombros de uno de los hangares del cosmódromo ruso de Baikonur (Kazajistán) que se hundió ayer provocando la desaparición de ocho personas, según indicaron hoy los equipos de rescate citados por la agencia Interfax
Siete de los ocho trabajadores que quedaron sepultados son kazajos, mientras que el otro era bielorruso, según el Ministerio kazajo de Situaciones de Emergencia, citado por la agencia Ria Novosti.
El portavoz de la agenca aeroespacial rusa, Serguei Gorbunov, declaró, citado por Itar-Tass, que “por el momento es difícil decir nada sobre las causas de la catástrofe”. Una comisión gubernamental de investigación dirigida por el ministro de Industria, Ciencia y Tecnología, Ilia Klebanov, partirá hoy de Moscú hacia Baikonur, con el fin de establecer la causa de la catástrofe, según esta misma fuente.
Tres de las cinco secciones del techo del hangar, construido en época soviética para el programa de transbordador espacial Burane y de 70 metros de altura por 120 metros de longitud, se hundió ayer por la mañana, sepultando a ocho obreros que trabajaban sobre el techo del edificio. El hangar albergaba un ejemplar del Burane así como su lanzadera, el cohete Energuia.
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