Aunque aún no se conoce el resultado de la autopsia y ante la posibilidad de que el trabajador hubiera sufrido un infarto, UGT recordó en nota de prensa que tanto la normativa laboral como la jurisprudencia consideran la muerte de un trabajador en tiempo y lugar de trabajo como un accidente laboral.
El trabajador de 32 años apareció reclinado en un depósito de 1,20 metros de altura y un metro de diámetro. Dicho depósito contenía tolueno, una sustancia depresora del sistema nervioso central. Aún así, el técnico de UGT no asegura a ciencia cierta, defendieron desde el sindicato, que la causa de la muerte sea la inhalación de este producto, aunque este hecho no sea relevante a la hora de determinar que se trata de un accidente laboral al ocurrir en tiempo y lugar de trabajo.
Por otra parte, el técnico no detectó en esta primera visita a esta empresa que se dedica a realizar molduras para una empresa anexa de pinturas, ninguna irregularidad en materia de Prevención de Riesgos Laborales.
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