La siniestralidad laboral mantuvo en el primer trimestre del año en Cantabria la tónica de descenso de los últimos años, con un recorte de la cifra total de accidentes, pero creció sin embargo el número de sucesos graves y también los mortales.
Así, según datos del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICAST), de enero a marzo de este año se registraron en la comunidad 1.170 accidentes laborales, un 21 % menos que en el mismo periodo de 2011.
El descenso se debe a la caída de los accidentes leves, que bajan un 22 % y se quedan en 1.150 siniestros en el periodo. En cambio, los accidentes graves crecieron un 27 %, al pasar de 15 en el primer trimestre de 2011 a 19 en el mismo periodo de 2012.
Y en el primer trimestre se produjo un accidente laboral mortal, mientras que hace un año, por esas fechas, no se había registrado ningún fallecimiento en el puesto de trabajo.
Por sectores, los servicios siguen concentrando la mayor siniestralidad, con el 53 % de los accidentes producidos en el periodo. A continuación se sitúa la industria, que concentra el 28 %, la construcción (14 %) y, en último lugar, el sector primario (5 %).
La siniestralidad se redujo en todos ellos, sobre todo en la construcción (-35 %) y la industria (-24 %) y por debajo de la media en el caso de los servicios (-16 %) y el sector agropecuario y pesquero (-7 %).
Los 19 accidentes graves registrados de enero a marzo se produjeron en el sector primario (7), la industria (7) y los servicios (5). Y el único accidente mortal correspondió a este último sector.
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