La Federación de Servicios de UGT (Fes-UGT) llevará a la negociación de los convenios estatales del sector del Ahorro, la Banca y la Seguridad Privada que el atraco sea un riesgo laboral específico derivado de las condiciones de trabajo.
Según el sindicato, al considerarse un riesgo laboral, su tratamiento debe realizarse mediante actividades preventivas de empresas y con la adopción de todas las medidas que sean necesarias para la protección de la seguridad y la salud de estos trabajadores.
Fes-UGT considera que la posibilidad del atraco, al estar contemplado como riesgo laboral, debe ser evaluado, algo que en estos momentos no ocurre ni en banca, ni en ahorro ni en transporte de fondos. Para el sindicato es fundamental que estas valoraciones contemplen el estrés y sus consecuencias psicosomáticas, así como el trastorno de estrés postraumático.
En sentido, UGT reclama un protocolo de vigilancia de la salud mediante un examen de salud preventivo por parte de los servicios de prevención de las empresas para todos los atracados, que estudie la ansiedad y otras lesiones de carácter físico, psicológico o psiquiátrico que pudieran derivarse. En el transporte de fondos se debe tener en cuenta el llamado riesgo de acera, es decir, cuando los vigilante abandonan el furgón o vuelven a él.
El sindicato propone a las empresas y mutuas de accidentes de trabajo la firma de un acuerdo de actuación posterior a la agresión, que incluya un procedimiento para el seguimiento de los trabajadores con baja por incapacidad temporal de contingencias comunes y que pudieran tener relación con el atraco.
En 2005 se produjeron 721 robos con violencia o intimidación en atracos a bancos y cajas. Estos sectores, unidos al de la seguridad privada, acoge a un total de 300.000 trabajadores.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
