Entre 100.000 y 300.000 personas sufren acoso moral en el trabajo o “mobbing” en Cataluña, lo que representa entre un 5 y un 15% de la población activa, según UGT, sindicato que ha pedido hoy cláusulas de prevención e intervención de esta práctica en la negociación colectiva.
La secretaria de Política Sindical de UGT Cataluña, Carme Rangil, ha pedido también la reforma de la normativa para que el “mobbing” sea calificado como una enfermedad profesional.
El acoso moral en el trabajo consiste en el ejercicio de una violencia psicológica extrema que una persona recibe por parte de otras de forma sistemática y prolongada en el tiempo. Con estas prácticas se busca deteriorar y disminuir la capacidad laboral de la víctima, desestabilizar su equilibrio psicológico y destruir su imagen profesional y social, así como la propia autoestima.
Según Rangil, el “mobbing” se utiliza en algunos sectores, como en el ámbito de la administración pública, para que los trabajadores abandonen su puesto de trabajo. La secretaria de salud laboral de UGT Cataluña, Carme Simarro, ha explicado que el “mobbing” se da más en la administración pública y en sectores como la sanidad, empresas de servicios, banca y ONG y ocurre igual en empresas grandes y pequeñas, aunque en estas últimas se hace más evidente.
Según Simarro, el perfil del “acosador” responde a una persona con complejo de inferioridad, el típico “trepa”, que va minando la autoestima de la persona a la que acosa. El sindicato ha editado una guía que pretende ayudar a identificar este tipo de acoso y a ordenar las pruebas necesarias para demostrar su práctica.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
