El Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Palencia ha ratificado una resolución de la Oficina Territorial de Trabajo de la Junta por la que sanciona a la empresa automovilística Renault de Villamuriel de Cerrato con una multa de algo más de 1.500 euros (250.000 pesetas) por una falta grave en materia laboral. La sentencia tiene carácter firme y no admite nuevos recursos.
Los hechos que han dado lugar a esta sentencia ocurrieron en octubre de 1999, cuando el operario Alberto Marroquí López sufrió la mutilación de dos falanges de los dedos índice y corazón, además de la totalidad del dedo medio, de la mano derecha cuando se encontraba realizando sus funciones en la nave de embutición.
El trabajador, que tuvo que ser sometido a una compleja intervención quirúrgica de los tendones centrales, sufrió un accidente similar al percance que tuvo otro trabajador en 1996, que perdió todas las falanges de una de sus manos, según aseguró ayer la CGT en un comunicado de prensa.
Esta organización sindical, que interpuso una denuncia ante la Inspección Provincial de Trabajo de Palencia en noviembre de 1996 por estos hechos, aseguró ayer en el escrito que como consecuencia de los accidentes los dos trabajadores han quedado en situación de invalidez permanente total.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
