Un estudio realizado por la consejería de Trabajo y Política Social revela que un 73 por ciento de los trabajadores de la Región encuestados consideran que hay “riesgos” en el desempeño de su profesión y en su puesto de trabajo, especialmente aquellos que tienen “contrato temporal”, donde la cifra asciende a un 79 por ciento.
Así lo explicó hoy el director general del Instituto de Seguridad y Salud Laboral (ISSL), Francisco Moreno, a agentes sociales y otros colectivos, quien estuvo acompañado por la consejera de Trabajo y Política Social, Cristina Rubio.
En la I Encuesta sobre Condiciones de Trabajo en la Región, realizada en los dos últimos años, se utilizó una muestra de 2.800 trabajadores, y, según indicó Rubio, “ha sido diseñada para un nivel de confianza de más del 95 por ciento y con un margen de error inferior del 3 por ciento”.
De igual forma, Rubio explicó que para llevar a cabo esta encuesta se siguió el modelo nacional, tanto en aspectos formales como en metodología, aunque matizó “se ha incluido también el sector agrícola-ganadero”, mientras las nacional sólo contempla los sectores industrial, servicios y construcción.
La titular murciana del ramo afirmó que un 89,6 por ciento de los trabajadores encuestados “se sienten bastantes satisfechos o muy satisfechos con las condiciones de su puesto de trabajo”, y destacó que el 93,6 por ciento de las empresas de la Región “han adoptado alguna modalidad de organización preventiva, siendo la modalidad de servicio ajeno la utilizada por el 83 por ciento de las empresas”.
Entre otros asuntos, Rubio indicó que el objetivo de esta encuesta es “mejorar la seguridad y salud laboral de los trabajadores” de la Región y aludió a los “cambios” en la forma de trabajar que “han tenido efectos en los procesos productivos”.
Finalmente, Cristina Rubio justificó este estudio por las trasformaciones “de forma vertiginosa” en ciertos sectores de la Región “que han incidido de forma incisiva desde le punto de vista de la Salud y Seguridad de los trabajadores”.
Sobre estos asuntos, el responsable del ISSL aludió a cambios tenidos cuenta para llevar a cabo este trabajo como las introducción de las Nuevas Tecnologías; al crecimiento del sector servicios; a las nuevas formas de trabajo “como la asistencia a domicilio o la teleasistencia”; al incremento de la capacidad de inserción laboral mediante cualificaciones; así como a los horarios “flexibles”.
También se refirió a otros cambios como el incremento de las pymes; las nuevas estructuras de gestión; el envejecimiento de la población activa; o a la incremento de la participación de la mujer y de los inmigrantes en el mundo laboral.
De igual forma y sobre las “causas” de esos riegos, un 54,3 por ciento lo achaca a la “confianza o costumbre” en el desempeño de trabajo; un 25,3 por ciento al “cansancio o fatiga”; un 16,5 por ciento a los “esfuerzos o posturas”; y un 12,1 por ciento al “tráfico”; mientras que achacaron a “cortes y pinchazos” el principal motivo por el que perciben ese riesgo, seguidos de “golpes, caídas de personas al mismo nivel y a distinto nivel”.
Un 46,4 por ciento de los encuestados afirmaron conocer la obligatoriedad de uso de los dispositivos de seguridad, cifra que en el sector de la construcción asciende hasta un 93,3 por ciento; un 68 por ciento en el de industria; un 49 por ciento en agricultura y ganadería; y, por contra, desciende a un 26,5 por ciento en el sector servicios.
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