La tasa de mortalidad a causa de algún tipo de cáncer de origen laboral y profesional es más elevada de la que parece. En la provincia de Alicante, cerca de mil ciudadanos fallecen cada año debido a tumores ocasionados por las condiciones de trabajo en las que se desarrollan a diario. El Instituto de Salud y Medio Ambiente de CC OO alerta de que se está experimentando un notable aumento de cánceres mortales en los sectores del textil, el calzado y la agricultura. La vinculación del trabajador con plaguicidas, en este último caso, y de disolventes y subproductos de hidrocarburos, en los otras dos actividades, es determinante en el aumento de enfermedades.
En la provincia de Alicante, fallecieron en el año 1996, último computado por el Servicio de Epidemiología del Cáncer del Centro Nacional de Epidemiología, un total de 6.042 hombres y 5.109 mujeres. Aproximadamente el 6% de esas muertes están causadas por las condiciones laborales y profesionales en las que se han desarrollado los pacientes, según explica el médico especialista en salud laboral y técnico del Instituto de Salud y Medio Ambiente (Istas) de CC OO, Alfonso Calera.
La tasa de mortalidad por cáncer profesional ha ido creciendo en los últimos años, de acuerdo con la información facilitada por este experto. El aumento de los tumores se produce, sobre todo, en la agricultura, el calzado y el textil, aunque la tasa de fallecimientos es muy importante en otras actividades, como los servicios.
Cerebral
En el caso de la agricultura, el principal aumento de cánceres son de tipo cerebral y afectan a los trabajadores que han estado en contacto directo con el uso de plaguicidas y otras sustancias químicas. En los sectores textil y del calzado, las sustancias químicas relacionadas con los disolventes que se usan como base para los pegamentos y colas empleados en la fabricación de zapatos y de tintes en la confección y productos de textil-hogar son el origen de las enfermedades. Estos disolventes son subproductos de los hidrocarburos y son altamente tóxicos, en especial los bencenos.
El médico Alfonso Calera advierte de que existe un reglamento de prevención de procutos químicos en el trabajo que es sistemática y generalizadamente incumplido por los empresarios y los propios trabajadores. La Ley de Seguridad y Salud Laboral establece, por su parte, hasta diecisiete protocolos específicos para la prevención en el uso de los productos químicos vinculados a los distintos cánceres. Tampoco se aplica esta normativa, según el responsable en la Comunidad Valenciana del Instituto de Salud y Medio Ambiente de CC OO y uno de los máximos responsables en epidemiología de este organismo en toda la red de España.
Por otro lado, hasta los hospitales públicos deben de cumplir con un protocolo específico de prevención de productos cancerígenos y no lo hacen, según Calera, quien recuerda que la Inspección de Trabajo de Alicante ya ha emitido más de un informe que advierte de este incumplimiento en la red asistencial.
El riesgo químico en la industria es generalizado. Además, reviste un carácter de gran complejidad por la continua y acelerada introducción de sustancias y compuestos nuevos que enfrentan a situaciones de riesgo mal conocidas, según explica el médico Alfonso Calera. «En general, falta información científica sobre los efectos de los tóxicos sobre la salud y el medio ambiente, a medio y largo plazo, en gran parte de las sustancias», explica este experto en salud laboral y en epidemiología.
Todo este panorama se complica más cuando se constata que las sustancias no se utilizan de forma aislada, sino que al mismo tiempo se pueden estar usando múltiples sustancia y de esta forma pueden dar lugar a efectos combinados. Es lo que se conoce en toxicología como multiexposición.
A estos factores de evolución tecnológica de la química industrial se deben añadir los cambios en el escenario sociolaboral. Las condiciones actuales de precariedad del empleo hacen que los trabajadores cambien con frecuencia de empleo y actividad. Por lo tanto, a lo largo de su vida laboral puede sufrir múltiples y variadas exposiciones a productos tóxicos. En muchos casos, estas exposiciones permanecerán ocultas.
Sustitución de productos
Con el fin de prevenir sus riesgos específicos y de garantizar una adecuada protección de la salud de los trabajadores y de las personas en general se han establecido normas legales que imponen limitaciones a la comercialización y al uso de sustancias y preparados, así como la sustitución en aquellos casos que sea posible. Desde el punto de vista sindical, según Calera, dicha normativa «es insatisfactoria», ya que frente a riesgos de esa envergadura sólo cabe la sustitución o cuanto menos la prohibición o el uso restringido, controlado y justificado. El riesgo es, además de grave, engañoso. Su largo periodo de latencia favorece el olvido y el aislamiento de los afectados, así como la falta de adopción de medidas de control y la impunidad de los responsables de la prevención. Motivos más que suficientes para considerar el problema como una prioridad de los delegados de prevención de las empresas, según el médico Alfonso Calera.
Consejos de la AECC
No fume: Si es fumador, deje de hacerlo lo antes posible y no fume en presencia de otras personas. Si no fuma, no pruebe el tabaco. Consumir tabaco no sólo aumenta el riesgo de padecer cáncer de pulmón, laringe o vejiga, sino que además está relacionado con enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
Una situación especial la constituye el embarazo. Modere el consumo de alcohol: Si bebe alcohol, ya sea cerveza, vinos o licores, modere su consumo. Actualmente se estima que el consumo de alcohol está relacionado con el 3% de las enfermedades cancerosas. Para un adulto sano, es perjudicial la ingesta de más de dos unidades de alcohol diarias. Si se une consumo crónico de alcohol y hábito de tabaquismo se multiplica el riesgo de padecer determinados carcinomas.
Coma verduras: Aumente el consumo diario de verduras y frutas frescas. Coma a menudo cereales con un alto contenido en fibra. Una alimentación variada y rica en productos vegetales ayuda a prevenir distinto tipos de cáncer.
Evite exceso de peso: Evite el exceso de peso, haga más ejercicio y limite el consumo de alimentos ricos en grasas. El sobrepeso se considera como un factor de riesgo en el desarrollo de ciertos tipos de cáncer como el endometrio (útero). Las dietas con grasas influyen en la aparición de cáncer de mama, intestino y próstata.
Cuidado con el sol: Evite las exposiciones prolongadas y las quemaduras por el sol, especialmente durante la infancia. La exposición excesiva al sol es agente causal de cáncer de piel. Hay que interponer barreras físicas entre el sol y la piel y utilizar protectores especiales. Respete productos peligrosos: Hay que respetar las normas destinadas a evitar exposiciones a sustancias consideradas cancerígenas. Debe cumplir todas las instrucciones de salud y seguridad.
MÁS INFORMACIÓN Un libro: Exposición laboral a agentes cancerígenos. Autor, Mario Grau Ríos. Edición 1999. 107 páginas. Editorial La Ley-Actualidad. Precio en España (21,04 euros). El autor es consejero técnico de la Dirección del Instituto Nacional de la Seguridad e Higiene en el Trabajo. Una web: http://www.aecc.es/ Teléfonos: Sede de la Asociación Española Contra el Cáncer en Alicante: 96 5924777 – 96 5130638
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