Gobierno regional, sindicatos y patronal acercaron ayer un poco más sus posturas en el Plan Director de Prevención de Riesgos Laborales, destinado a evitar la siniestralidad en el trabajo. Las divergencias que marcaron la negociación del plan, principalmente centradas en las comisiones de vigilancia de la construcción, se salvaron en la reunión del Consejo de Madrid. Así, sólo falta ya fijar la fecha para firmar el documento, con la presencia del presidente del Gobierno regional, Alberto Ruiz-Gallardón.
La superación de este escollo es precisamente el punto fuerte del texto: habrá definitivamente comisiones de vigilancia tripartitas en las empresas privadas, al igual que se había acordado para las obras privadas. Para ello se modificó un punto del articulado y se acordó constituir una Comisión de Construcción, a la que en principio se oponía la patronal madrileña.
«Teniendo como base el convenio de la construcción -dijo el consejero de Trabajo, Luis Peral- se hará un acuerdo de colaboración entre la Consejería de Trabajo y la Fundación Laboral de la Construcción para realizar 1.000 visitas anuales a empresas que no dispongan de Delegado de Prevención o Servicio de Prevención propio. La financiación de esas visitas correrá a cargo de la Consejería».
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