Unas 36 empresas del sector servicios y administración pública, en la que se incluirá ayuntamientos de la provincia, comercios, talleres de reparación de vehículos y actividades inmobiliarias formarán parte del primer grupo de entidades que compondrán el Plan Alerta Roja, que se pondrá en marcha por primera vez en el sector servicios en la provincia de Jaén con el objeto de bajar los datos de siniestralidad laboral que se producen.
Según explicó el delegado de Empleo y Desarrollo Tecnológico, Juan de Dios Alcázar, entre estas entidades se encuentran ayuntamientos que poseen casas de oficios y escuelas taller con jóvenes trabajadores “con poca experiencia” que hacen trabajos para el Plan de Empleo Rural, y que poseen una alta siniestralidad laboral, entre ocho accidentes o cuatro siniestros muy graves.
El plan Alerta Roja, que se puso en marcha hace cuatro años y que ya abarca todos los sectores productivos, realiza una labor de recopilación de datos, ver qué empresas incumplen las medidas de seguridad establecidas y poseen una mayor siniestralidad, analizar los puntos débiles, hacer un seguimiento “para llegar al origen del problema” y labores de inspección.
En los cuatro años de vigencia del Plan Alerta Roja, la incidencia por mil habitantes ha descendido de 54 en 1999 a 49,04 en 2002. En la comparación de los años 2001 y 2002, el sector de la construcción, –donde actualmente hay incluidas 45 empresas–, ha experimentado un descenso de los accidentes del 38,02 por ciento, por lo que sólo cinco empresas tienen un índice por encima de los permitidos y permanecerán en el plan, al que se unirán otras 30 empresas y donde se quiere incidir este año en el control de las subcontratas.
En el sector de la industria, se experimentó un descenso del 31 por ciento en la accidentalidad, de forma que de las 46 empresas, sólo nueve quedan incluidas en el plan de alerta, al que se sumarán otras 35 nuevas. En la agricultura, dentro del llamado Plan Alerta Verde las 39 empresas que forman parte de esta iniciativa ha experimentado un descenso del 35,85 por ciento en la siniestralidad.
Al margen de los planes alerta roja, Juan de Dios Alcázar recordó que en el año 2002 la provincia de Jaén fue junto a Almería la única andaluza donde bajó la siniestralidad laboral, con 11.161 accidentes, de los que un 94 por ciento se registraron durante la jornada de trabajo, un 4,81 por ciento en el trayecto y un 4,1 por ciento enfermedades laborales. Este dato denota una bajada del 1,54 por ciento con respecto a 2001, cifra que se aumenta hasta el 3,07 por ciento en el caso de los accidentes en el centro de trabajo.
Los accidentes mortales descendieron un 46,67 por ciento al pasar de 15 en 2001 a 8 en 2002. No obstante, Alcázar apuntó el aumento de siniestros entre los trabajadores indefinidos, mientras que las víctimas de siniestros en 2001 pertenecían más a la categoría de trabajadores por obras y servicios.
El representante de CC.OO. y miembro de la comisión provincial de Riesgos Laborales, Juan José López Megías, mostró su satisfacción por que todos los sectores estén en el plan de choque y reconoció que en cifras absolutas sólo subieron los accidentes en la construcción “aunque como creció la población activa, se reduce”.
No obstante, reconoció que el índice de incidencia descendió excepto en agricultura, donde según Alcázar “todavía es difícil impregnar de la cultura preventiva, al no ser todos los que trabajan empresarios y no ser especialistas ni profesionales en el trabajo, sino temporeros que recogen en las diversas campañas agrícolas”.
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