El inadecuado diseño del mobiliario y la falta de espacio está aumentado el número de bajas laborales en las oficinas, ya que obligan al trabajador a adoptar posturas inadecuadas, según señaló la investigadora de Ergonomía del Trabajo del Instituto de Biomecánica de Valencia, Alicia Piedrabuena, quien esta tarde impartirá una conferencia a empresarios y responsables de prevención de riesgos laborales en la sede la patronal CAEB.
Piedrabuena explicó que, a pesar de la menor gravedad de los trastornos musculoesqueléticos en las oficinas, se está produciendo en los últimos años un aumento importante de las bajas, especialmente en aquellas Comunidades Autónomas costeras, como Baleares, que dedican su activivad económica al sector servicios.
En este sentido, insta a los empresarios y directivos a efectuar estudios de detección y evaluación de este tipo de riesgos, para conocer así los “puntos negros” existentes en su empresa, porque “al final ganará en productividad y se reducirán los costes derivados de las bajas”.
Según explicó esta experta, la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo estima que el coste de los trastornos musculoesqueléticos relacionados con el trabajo está entre el 0,5 y el 2 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). En el caso de España, los accidentes de trabajo con baja calificados como sobreesfuerzos suponen el 31 por ciento del total y originan el 28 por ciento de las jornadas de trabajo perdidas.
Por ello, sostiene que la carga física en el trabajo no sólo se debe asociar al sector industrial, donde sí que incide más gravemente, sino también en las oficinas. En el seminario con empresarios en la sede de la patronal balear, Piedrabuena subrayará la importancia de identificar los factores de riesgo relativos a la carga física que se deben evaluar en cada empleo y el tipo de medidas preventivas a adoptar por la empresa y el trabajador.
Los factores de riesgo más importantes asociados a la carga física son las manipulación manual de cargas (levantamiento, transporte, empuje o arrastre), los movimientos repetitivos y las posturas forzadas o inadecuadas que, según esta experta, suelen estar presentes en todas las actividades laborales, dañando la salud del trabajador y repercutiendo en el rendimiento y la productividad de la empresa.
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