Promocionar la salud desde la atención primaria es bastante difícil en colectivos que apenas padecen enfermedades o tienen un apretado horario laboral, ya que apenas van al médico. Es el caso de miles de trabajadores y de los inmigrantes jóvenes y fuertes que vienen a trabajar a España. Asepeyo propone cómo llegar a ellos.
Las acciones de promoción de la salud deberían potenciarse más en la población laboral activa, que al estar sana es el colectivo que menos acude a los centros de atención primaria, ha dicho Manuel Santaló, director médico de Asepeyo. Utilizar la empresa para difundir consejos de salud hace más fácil acceder a los empleados. Este es el punto de partida de la iniciativa que ha emprendido Asepeyo, primera Mutua de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales de Cataluña por número de trabajadores y empresas afiliadas, y la segunda de España, con más de 200 empresas afiliadas y 2 millones de trabajadores, lo que supone un 15 por ciento de los empleados españoles.
La mutua ha lanzado 100 consejos para promocionar la salud en la empresa, una obra de divulgación que contiene 10 capítulos sobre problemas de salud comunes, como el tabaco, el alcohol, la automedicación o el estrés, y otros 10 capítulos dedicados a riesgos laborales específicos, como la visualización de datos en pantallas, los riesgos biológicos, de agentes químicos, de incendios, de la construcción, la manipulación de cargas, los agentes térmicos, los ruidos y las vibraciones.
La inclusión de unos apartados dedicados a las patologías más comunes es un modo de interesar a más trabajadores, ya que hay riesgos laborales muy específicos de cada oficio o profesión que no afectan al resto, ha explicado Santaló.
Con la idea de que los 100 mensajes saludables lleguen al grupo más amplio de empleados, el librito se ha editado en cinco idiomas: castellano, catalán, gallego, euskera y árabe.
Para inmigrantes
“Traducirlo al árabe no ha sido una tarea sencilla. Sin embargo hemos contado con la ayuda de traductores para adaptarlo, con algunas variantes, para ser respetuosos con la cultura del mundo árabe”.
Asepeyo ya ha comprobado que en algunas zonas de España, como Melilla, existe un 50 por ciento de trabajadores que hablan árabe. En otras zonas del país el porcentaje se sitúa entre el 5 y el 10 por ciento, pero aun así este colectivo debe ser un importante blanco de las acciones de promoción de la salud.
Las recomendaciones son totalmente nuevas para muchos inmigrantes. “En las consultas podemos perder tiempo para explicarles las cosas, repetírselas tres veces y asegurarnos de que las han entendido”, pero lejos del médico son un grupo vulnerable.
“El 70 por ciento aprenden a hablar antes que a leer el nuevo idioma y pierden el interés cuando tienen que hacerlo. Por eso hemos optado por facilitarles la lectura, traduciendo los consejos a su idioma. Para un trabajador español pueden ser evidentísimos, pero para inmigrantes son de mucha utilidad al proceder de países más subdesarrollados y carecer de esta cultura de prevención”. De hecho, las escuelas españolas ya divulgan mucho más los temas relacionados con la promoción y prevención de la salud. “Por eso una buena labor promocional debe centrarse en quien más lo necesita y, a veces, nos centramos en el que menos lo necesita”.
La promoción de los 100 consejos se hará de modo más intensivo a lo largo del 2004. “Aunque es difícil medir el impacto sanitario de los buenos hábitos, debemos seguir suministrando información”.
Lograr empresas libres de humo es otro de los retos que las compañías deben lograr antes de 2007, cuando entrará en vigor la nueva normativa que impide fumar en el lugar de trabajo. Muchas compañías ya han puesto en marcha iniciativas para que sus empleados dejen de fumar. Asepeyo ha diseñado un programa integral de abordaje del tabaquismo, denominado Ex-fúmate, para ayudarlos. Alrededor de un tercio de fumadores se plantean dejar de fumar y, de ese porcentaje, lo logra un tercio. Lanzar este tipo de programas es importante porque, de otra forma, muchos fumadores no pensarían en abandonar el hábito tabáquico, ha comentado Manuel Santaló. Ex-fúmate ofrece apoyo médico continuo y propone que se formen grupos para decidir cómo ir eliminando el tabaco de las empresas progresivamente, ya que por ahora se ha visto que es la medida más efectiva.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
