La Generalitat ha decidido tomar medidas contra la siniestralidad laboral, que desde el 15 julio se ha cobrado 22 víctimas en Cataluña, siete de ellas la semana pasada.
El conseller de Treball, Lluís Franco, se comprometió ayer a duplicar los efectivos del cuerpo de Técnicos de Seguridad y Salud en el Trabajo de la Generalitat. Este equipo de funcionarios, que se encarga de controlar el cumplimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales, está formado por unos 50 técnicos.Treball prevé disponer de hasta 110 funcionarios adscritos a este cuerpo en un plazo de dos años.
A pesar de esta medida, Franco reconoció que los recursos tanto humanos como materiales destinados al control de la prevención de riesgos laborales son insuficientes en Cataluña, donde existen unas 240.000 empresas. Además, el conseller explicó que las actuaciones de control y sanción corresponden a la inspección de trabajo, que depende del Gobierno central y subrayó que incrementar los activos de este cuerpo no compete al Govern. Sin embargo, Franco destacó que la inspección ha revisado 45.000 empresas en los últimos dos años y medio y que ha impuesto 14.000 sanciones en ese periodo. Treball pretende intensificar también su política de prevención de la siniestralidad laboral a través de campañas de concienciación y cursos de formación.
Escasa inversión
Sin embargo, la izquierda y los sindicatos catalanes consideran que estas medidas son todavía insuficientes. El presidente de ICV, Joan Saura, culpó ayer a la Generalitat del incremento de los accidentes laborales y aseguró que la inversión del Govern en prevención es insuficiente. Saura denunció que Treball destina 2,6 millones anuales a salud laboral, frente a los diez millones que la formación ecosocialista considera necesarios. ERC acusó a la Generalitat de aplicar «con dejadez» la ley de prevención de riesgos y pidió que se cree una fiscalía especializada en esta materia.
UGT de Catalunya exigió un plan integral de seguridad laboral.El sindicato insistió en que siete de cada diez empresas no cumplen la normativa de prevención. Para UGT, las medidas de control y fiscalización son todavía insuficientes y las muertes en el trabajo se deben a la subcontratación, la temporalidad en el empleo y la actuación irresponsable de algunas mutuas de trabajo.El sindicato propone la creación de una comisión que investigue a fondo las causas de los accidentes, el aumento de los efectivos de vigilancia y control, la incorporación de los cuerpos de seguridad municipal a las tareas de inspección y la puesta en marcha de un organismo para actuaciones urgentes.
Los sindicatos se reunirán el próximo día 9 con los representantes del Departament de Treball y las patronales para solicitar que el Parlament apruebe una ley catalana de salud laboral. Con esta iniciativa, pretenden que Cataluña consiga más recursos para paliar la siniestralidad y el control de la inspección de trabajo.
No obstante, sindicatos y patronales defienden posturas enfrentadas en esta cuestión. Fomento del Trabajo rechazó ayer la responsabilidad de los empresarios en las muertes de trabajadores y defendió que las normas de prevención se aplican «a rajatabla». El responsable de relaciones laborales de esta patronal, José Luis Salido, aseguró que es una «tontería» decir que la causa de los accidentes es «la falta de aplicación de estas normas», informa Efe. «A lo mejor el empresario ha hecho todo lo humanamente posible para que no se produjera el accidente y éste tiene lugar por un acto inseguro del trabajador», añadió Salido.
Mientras, el presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa Pimec-Sefes, Josep González, advirtió que no se puede «demonizar» a los empresarios y pidió que se acepte la «corresponsabilidad» de empresarios, sindicatos, obreros y administración en los accidentes de trabajo.
En julio de 2001 murieron en Cataluña 20 trabajadores y 15 en agosto. Este año, julio registró 21 víctimas y agosto 12.
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