Los 733.466 autónomos que operan en actividades consideradas con mayor siniestralidad, como la construcción o el transporte, deberán pagar una media de 800 euros al año para estar cubiertos en caso de accidente laboral una vez que entre en vigor el Estatuto del Trabajo Autónomo.
Esta futura normativa, que se espera esté operativa a mediados de 2007 y que ahora sólo es un anteproyecto de ley, recoge esas previsiones en su memoria económica.
En el citado Estatuto se establece que, tanto los autónomos dependientes (los que obtienen al menos el 75% de sus ingresos de una misma empresa) como los que se dedican a actividades de riesgo estarán obligados a cotizar por accidentes de trabajo y enfermedad profesional.
De los más de 3 millones de autónomos dados de alta, en agosto de 2006 sólo el 8,69% (263.156) cotizaba por esos conceptos a la Seguridad Social. Por tanto, una vez que se apruebe el Estatuto, 733.466 emprendedores abonarán unas cuotas anuales de 586,66 millones de euros a la Seguridad Social, según la memoria económica del anteproyecto de Trabajo.
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