El Comité de Empresa de RENFE y el Sindicato de Maquinistas tributó ayer un homenaje a las 19 personas fallecidas en el accidente ferroviario de Chinchilla (Albacete) ocurrido el 3 de junio de 2003 cuando un Talgo que cubría el trayecto Madrid-Cartagena (Murcia) chocó de frente con un tren de mercancías en una vía de único sentido. La colisión se produjo en el kilómetro 297 de la línea Madrid-Cartagena, junto a la estación de Chinchilla, el mismo punto en el que ayer se depositaron decenas de ramos y coronas de flores en memoria de las 19 víctimas mortales, catorce pasajeros y cinco empleados de la empresa ferroviaria.
Encabezó el homenaje, al que también acudieron familiares de algunos de los fallecidos, el presidente del Comité de Empresa de RENFE, Salvador Molina, que expresó el «sentimiento de tristeza y rabia que tenemos el colectivo ferroviario cada vez que ocurre un accidente». El momento de más emoción del acto tuvo lugar cuando un tren que circulaba en dirección a Valencia hizo sonar su silbato al pasar junto al punto kilométrico del accidente en medio del minuto de silencio que guardaban los empleados ferroviarios y los familiares.
Un año después, un juzgado de Albacete investiga el siniestro con un único imputado, el factor de circulación de la estación de Chinchilla, de quien sólo ha trascendido su nombre, José Luis, y a quien la fiscalía considera autor de un presunto delito de homicidio por imprudencia.
De lo ocurrido en la noche del 3 de junio de 2003 aún quedan muchos interrogantes. Así, el factor asegura que él no ordenó al maquinista del Talgo proseguir su viaje en dirección a Cartagena cuando enfrente, en una vía de único sentido, circulaba un tren de mercancías, una versión de la que duda RENFE y que el maquinista del tren de pasajeros nunca podrá desmentir o confirmar ya que fue uno de los muertos en la colisión.
Los sindicatos, los únicos que han salido en defensa del factor, llaman la atención sobre la precariedad de medios materiales que padece esta línea entre Albacete y Cartagena. Como ejemplo de ello recuerdan que el factor, al percatarse del accidente que iba a ocurrir minutos después de la salida del Talgo, trató de ponerse en contacto con el maquinista para que éste detuviera la locomotora, algo que no pudo hacer ya que no existía una línea de comunicación entre la estación y el tren.
El único imputado por este suceso se encuentra en situación de baja laboral al sufrir «estrés postraumático». El factor, en una carta remitida a los medios de comunicación con motivo de este aniversario, afirma que comparecerá públicamente cuando su salud se lo permita y anima a los familiares de las víctimas a superar el duelo. Según su abogado, Julián Pérez Charco, el estado anímico del factor de la estación ha empeorado en los últimos días «al rememorar lo ocurrido, ya que le afecta porque fueron muchas las víctimas». A la espera de que los tribunales depuren responsabilidades, CC OO se opone a que todas las culpas recaigan en este trabajador. Según el secretario general de este sindicato en Castilla-La Mancha, Juan Antonio Mata, «no es ahí donde hay que buscar responsabilidades, y prueba de ello es que después del accidente se puso en marcha un conjunto de inversiones para modernizar la vía que, por cierto, aún no se han ejecutado».
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
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