La siniestralidad laboral en Asturias durante 2000 disminuyó un 1,7 por ciento con respecto al año anterior, según se desprende de la última memoria de la fiscalía a partir de las estadísticas del Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales. Los datos reflejan además una significativa disminución del 12,8 por ciento en los accidentes mortales y del 1,9 por ciento en los de carácter leve. En cambio, los siniestros con resultados graves se incrementaron en un 14,6 por ciento. La tendencia a la reducción de Asturias contrasta con un incremento de la media nacional en torno al 17 por ciento, según confirmó ayer la consejera de Trabajo, Angelina Álvarez. «Sabemos que hay un componente de azar en la siniestralidad, pero estamos trabajando para que cada vez éste sea menor», afirmó.
A pesar de los resultados, el fiscal encargado de investigar la siniestralidad laboral en Asturias, José Luis Pinedo, alerta de la aún «elevada» tasa de accidentes en Asturias, que en los últimos años no han hecho más que elevar las estadísticas. De hecho, los datos que maneja la fiscalía, y contra las cifras del Principado, siguen manteniendo esta tendencia al alza, con 456 accidentes registrados en Asturias en 2000, frente a los 305 de 1999. La explicación a esta discrepancia está en que los datos que maneja la Administración se refieren sólo a los accidentes de 2000, mientras que los del TSJA son los asuntos despachados ese año, con independencia de su fecha de producción.
456 asuntos
De los 456 asuntos despachados por la fiscalía, 17 tuvieron resultado de muerte; en 15 se produjeron lesiones graves y en 2 de ellos leves. En cuanto a las actividades que los produjeron destaca la construcción (10 de los siniestros), seguida de la industria (7) y la minería, con un espectacular descenso desde los 20 registrados en 1999 a los cinco de 2000. Del total de asuntos, 430 fueron «claramente accidentales», sin relevancia penal (la mayoría, 12, producidos en la minería) y el resto, 26, dieron lugar a una investigación posterior: en estos siniestros se produjeron cinco muertos y tres heridos graves en la minería; cinco muertos y siete heridos graves en la construcción; cuatro muertos y cuatro heridos graves en la industria, y el resto de actividades, tres muertos y un herido grave. Una vez analizadas las circunstancias que produjeron estos accidentes, la fiscalía acordó el archivo en 23 causas y detectó la existencia de una falta en los otros tres.
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