Hace pocos días los principales periódicos de tirada nacional se hacían eco de la siguiente noticia: “Los trabajadores españoles son los más estresados de toda Europa”. Pero paradójicamente, si nos remontamos unos cuantos años atrás, concretamente siete, los titulares con los encontrábamos iban en esta línea: “Los trabajadores españoles, entre los menos estresados de Europa”. La pregunta es: ¿Tanto han cambiado las cosas en nuestro país, para que se haya producido un giro de 180 grados en las condiciones laborales de las trabajadoras y trabajadores españoles?
Y es que por desgracia, así es, la maldita crisis económica, ha provocado que en España se sufran los niveles de estrés más altos de todo el continente Europeo.
Tal y como ha concluido el estudio elaborado por la consultora Towers Watson, se ha podido constatar que la mitad de los asalariados españoles padecen “excesiva presión” en su puesto de trabajo, mientras que en otros países de la UE los porcentajes se reducen bastante. Por otra parte concluye que los trabajadores españoles se sienten “estancados y estresados” ante una visión “pesimista” del mercado laboral, por trabajar demasiadas horas y por la escasez de oportunidades para progresar en su empresa, dado que el 70% de los encuestados afirma que en su empresa ya no se ofrecen oportunidades de promocionar, sino que todo lo contrario.
Otra de las causas que se suman es la incertidumbre hacia la jubilación, ya que casi la mitad de los trabajadores están preocupados porque esperan jubilarse entre los 65 a 69 años. Además un 74% de los españoles afirman estar preocupados por su economía a largo plazo, mientras que en el resto de la UE la preocupación es bastante menor, con un 52%.
Por último, la mayoría piensa que esta situación no mejorará a corto plazo, sino que irá a peor, aumentando las cargas de trabajo, prueba de ello es que el 48% de los encuestados ha respondido que piensan que su empresa espera que se trabaje más horas de lo normal, aunque ya en un 60% de los casos ha respondido que lleva tres años haciéndolo.
No obstante, si la cosa no pinta nada bien para los trabajadores y trabajadoras españoles, en Europa la situación tampoco está mucho mejor. Según datos de la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, el 30% de los trabajadores europeos está estresado, lo que equivaldría a un total de cuarenta millones de personas. Y sin embargo, sólo el 26% de las empresas europeas ha tratado el problema para atajarlo, y en España no se llega ni si quiera a ese porcentaje. Otra encuesta de la Agencia realizada en 2009 revelaba que el 79% de los empresarios consideraba que el estrés constituía un problema en sus organizaciones, lo que colocaba a este trastorno en un nivel de importancia similar al de los accidentes laborales.
En este sentido, ya en el año 2011, desde CCOO se organizó una jornada que sirvió de intercambio de conocimientos sobre como los procesos de reestructuración y ajustes de plantilla, despidos colectivos, e incluso cierres de centros de trabajo, tienen consecuencias negativas para la salud, tanto para los que conservan su empleo, como para los que lo pierden.
Para el sindicato la restructuración y ajustes de plantilla producen un empeoramiento de las condiciones de trabajo, que van desde la disminución de salario, aumento de la jornada y ritmo de trabajo, mayor disponibilidad e inseguridad en el empleo, falta del reconocimiento del trabajo por parte de los superiores, aumentan los contratos temporales y la subcontratación, etc.
Este tipo de situaciones deriva en que los trabajadores por lo general, se encuentren en una situación de amenaza continua e insatisfacción laboral, lo que acrecienta las repercusiones en la salud, incrementando los factores de riesgo psicosociales, que se reflejan con la aparición de enfermedades cardiovasculares y problemas de salud mental, como el estrés.
Por esta razón para CCOO uno de los retos más significativos en el ámbito de la salud laboral, se presenta ante los riesgos psicosociales, ya que el estrés, el acoso o el malestar psíquico que sufren muchos trabajadores y trabajadoras son resultado de una mala organización del trabajo y no de un problema individual, de personalidad o que responda a circunstancias personales, como quieren hacer creer algunos.
Los efectos negativos que pueden producir este tipo de riesgos si no se previenen con la suficiente antelación pueden llegar a resultar irreparables para la salud. Por eso desde el sindicato se demandan que desde las empresas se tomen medidas, que pasan por:
- El cumplimiento real y efectivo de la Ley de prevención de riesgos laborales.
- Inclusión de los riesgos psicosociales en las evaluaciones de riesgos.
- Fomento de la participación de los trabajadores a través de los Delegados y Delegadas de prevención.
- Formación e información especifica a las necesidades del puesto de trabajo, como puede se el fomento de la educación en técnicas de relajación física y psíquica, siempre desde la intencionalidad de potenciar la cultura preventiva.
- Realizar la vigilancia de la salud teniendo en cuenta los riegos que tengan que ver con la organización del trabajo.
Si estás medidas no se llevan a cabo pueden llegar a repercutir en la salud de los trabajadores de forma grave, por eso es importante aprender a reconocer los posibles síntomas para que éstos no vayan a más:
- Dolores frecuentes: La tensión se acumula en los músculos de la espalda, dolor de cabeza, acidez de estómago, indigestión o digestiones difíciles, etc.
- Insomnio: Los problemas para conciliar el sueño y la falta de descanso son uno de los primeros síntomas.
- Nerviosismo, exceso de actividad, ansiedad, angustia. Impaciencia e irritabilidad.
- Falta de concentración, fatiga intelectual, inapetencia a las tareas habituales, descuidos, descenso del rendimiento intelectual o físico, etc.
- Depresión, tristeza, abatimiento general.
- Dificultad de recuperación, agotamiento constante: se hace difícil levantarse por la mañana.
Por eso, si padeces alguno o varios de estos síntomas de forma prolongada, no te quedes parado y ponle remedio, porque no estás solo tienes quien te ayude
Secretaría de Salud Laboral y Seguridad Social de CCOO Castilla y León
Secretaría de Salud Laboral y Seguridad Social de CCOO Castilla y León.
Fuente BOICCOOT a la Siniestralidad Laboral, nº 128
Este contenido ha sido publicado en la sección Artículos Técnicos de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
