Un técnico de sonido, trabajador de la Expo, falleció al caer de una altura de trece metros en el auditorio del Palacio de Congresos cuando realizaba los preparativos del espectáculo Eau, de Carolyn Carlson. Se trata de la primera víctima en accidente laboral desde que comenzaron los trabajos del recinto hace dos años -otro empleado murió en las obras de acompañamiento-.
Al parecer, el trabajador se precipitó al vacío al pisar un falso techo de pladur y caer al patio de butacas del auditorio.
El fallecido realizaba labores de mantenimiento en una zona situada encima del auditorio. Esta zona está dotada de pasarelas técnicas transitables para el mantenimiento de las instalaciones de sonido e iluminación de los distintos actos que tienen lugar en la sala. Por causas desconocidas, el trabajador, que caminaba por una de ellas, “pisó fuera de la misma un falso techo y cayó”, precisó el director de comunicación de la Expo, Antonio Silva.
Los representantes de CCOO, Manuel Pina, y de UGT, José Manuel Solanas, hicieron una declaración conjunta en la que lamentaron el accidente y subrayaron que, a falta de más datos, la causa podría ser “desde una imprudencia hasta falta de medidas de seguridad”. “Conocemos bien esa zona y no se puede transitar por ella sin un arnés -añadió Pina-. No sabemos por qué estaba allí ni qué estaba haciendo”. Según el relato del responsable sindical, un compañero iba por delante del fallecido, pero por dentro del pasillo de seguridad, cuando un grito le hizo volverse hacia atrás y vio cómo caía al vacío. Solanas, por su parte, aseguró que, hasta el momento, no se habían registrado quejas en materia de seguridad, y reiteró que no era previsible que se produjese este accidente.
En el lugar de los hechos se personaron de forma inmediata una uvimóvil del 061 y otra del servicio de Bomberos, que intentaron reanimar al trabajador sin que pudieran hacer nada por salvar su vida. A las 19.55 horas, el cadáver fue trasladado al Instituto Anatómico Forense para practicarle la autopsia. La Inspección de Trabajo y técnicos del Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral han abierto una investigación.
De cara a los visitantes, el suceso se gestionó con discreción. El espectáculo Eau fue cancelado de inmediato, y la organización procedió a tomar los datos de los asistentes para reintegrar el importe de las entradas. La mayor parte del público aseguró desconocer los motivos por los que se había anulado la actividad, e incluso los trabajadores del edificio negaron saber los detalles concretos. Posteriormente, el resto de los espectáculos fueron también anulados, a excepción del Iceberg y el Hombre Vertiente.
Silva lamentó la “triste pérdida” de este trabajador y trasladó su pesar a la familia. Este suceso quiebra el historial sin muertes de la Expo, en cuyas obras, que se prolongaron durante casi tres años, se registraron 286 accidentes, de los cuales solo uno fue grave y ninguno mortal.
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