Sidenor Industrial de Reinosa realizará los reconocimientos médicos pertinentes a los trabajadores que hayan podido estar en contacto con la emisión radioactiva de Cesio-137 registrada ayer en la planta y no retomará la actividad de la Acería hasta que no se den por concluidas en su totalidad las labores de descontaminación.
Según informan la Dirección y el Comité de Empresa en un comunicado conjunto, los técnicos de la Universidad de Cantabria que se desplazaron en la tarde de ayer para repetir los análisis que hizo por la mañana la propia planta, señalan que “no podría deducirse que el accidente haya supuesto ninguna nocividad para la salud de los trabajadores”.
No obstante, la empresa “para mayor seguridad y tranquilidad de todos” recabará la colaboración de los organismos competentes de cara a realizar a efectuar los reconocimientos médicos pertinentes a todos los trabajadores de la Acería o que hayan tenido relación con el proceso productivo de dicho departamento, en el que se detectó la radiación.
En cuanto a la descontaminación, el comunicado explica que la actividad de la Acería no se retomará en tanto no se concluyan los trabajos que sean indicados desde el Consejo de Seguridad Nuclear y se tanga la “garantía de que la actividad se puede retomar sin ningún menoscabo para la salud de los trabajadores”.
Dirección y Comité de Sidenor recuerdan que en la mañana de ayer en la fábrica de Reinosa se detectó que un camión cisterna cargado de polvos de Acería arrojaba indicios de contaminación radiactiva, por lo que, siguiendo el protocolo y procedimiento establecidos para esta situación, se ordenó la inmovilización de la cisterna y se sacaron muestras del polvo que transportaba para su análisis.
Asimismo se reunió la Dirección y el Comité de Empresa para analizar la situación, al tiempo que se solicitó la colaboración de técnicos de la Universidad de Cantabria para que pudieran confirmar los datos obtenidos y descartar así cualquier posible falsa alarma.
A la luz del primer análisis, el de la empresa, al confirmarse los indicios de radiactividad en las muestras de polvo, se ordenó la paralización de la actividad productiva de la Acería. Posteriormente, a las 15.00 horas se personaron en la fábrica los técnicos de la Universidad de Cantabria y sus resultados confirmaron la contaminación radiactiva por Cesio, por lo que se procedió a acotar las zonas de campo.
Con los datos ya confirmados se realizó la correspondiente notificación a la UTPR (Unidad Técnica de Protección Radiológica) y al CSN (Consejo de Seguridad Nuclear), dándoles traslado de las actuaciones realizadas hasta dicho momento.
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