La Inspección de Trabajo ha aplazado para la próxima semana la comparecencia del empresario propietario de Mármoles Carretero, compañía en cuyas instalaciones en Villaverde del Río falleció el pasado lunes un joven de 15 años al caerle encima la máquina elevadora que conducía.
El jefe adjunto de la Inspección, Pedro Jiménez Campos, aseguró a Europa Press que un representante del empresario había presentado documentación que justificaba con un certificado médico la imposibilidad de éste para acudir a Sevilla a prestar declaración sobre lo ocurrido, según informaron fuentes sindicales.
Además, los inspectores de trabajo tomarán testimonio el próximo lunes en Villaverde al padre de la víctima, así como a los empleados que había en el centro de trabajo cuando se produjo el accidente y que pudieron ser testigos del mismo. También se visitará la empresa para hacer una inspección ocular del lugar del siniestro, cosa que tras el accidente no se pudo hacer porque las instalaciones se encontraron cerradas.
El suceso tuvo lugar sobre las 9.20 horas en las inmediaciones de las dependencias de una empresa dedicada a la instalación de solería cuando de forma accidental la máquina elevadora volcó sobre uno de sus laterales, aplastando el cuerpo de José Antonio R.R., de 15 años.
La investigación abierta por la Inspección de Trabajo se dirige a averiguar si existía relación laboral entre el menor y la empresa, así como si se incumplió la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
En caso de que se haya producido una infracción se levanta un acta de sanción que se remite a la Delegación Provincial de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía –quien tiene transferidas las competencias– para que continúe con el trámite administrativo. Además, si hay infracción el informe elaborado también se remite al juzgado de Instrucción pertinente.
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