Todo apuntaba a que una negligencia provocó el accidente mortal ocurrido el martes en Benalmádena, junto a la autovía A-7, cuando una grúa cayó sobre dos obreros granadinos de 25 y 32 años de edad que trabajaban en la construcción del centro comercial Altos del Higuerón, causándoles la muerte. Ayer, se confirmaron esas impresiones iniciales, y la delegación provincial de la Consejería de Empleo desveló que la máquina era manejada en el momento del suceso por una persona sin cualificación para ello: el encargado de la obra.
El delegado de Empleo, Juan Carlos Lomeña, explicó que el inspector y el técnico del Centro de Prevención encargados de hacer el informe sobre el accidente le informaron ayer de que el encargado de la obra, cuya identidad se mantiene en secreto, manejó la grúa ante la ausencia del responsable de esa función, para la que hay que tener un título de gruista que conceden empresas homologadas. Además, según Lomeña, la grúa cargaba 2.400 kilos cuando se partió, pese a que su capacidad máxima era de 2.000 kilos, un 20% menos. El delegado de la Junta anunció que el caso se trasladará a la Fiscalía de Málaga por si existieran responsabilidades penales.
El secretario de Organización de la Federación del Metal y la Construcción de UGT, Antonio Díaz, valoró ayer el suceso: «Tenemos claro que ha habido negligencia, por la antigüedad de la máquina, que estaba obsoleta y cuyo agotamiento es patente», dijo. Preguntado acerca de que fuera una persona no cualificada la que manejaba la máquina, Díaz respondió: «La máquina falla, pero no porque la lleve una persona cualificada o no». Además, el representante sindical dijo tener constancia de que el Organismo de Control Autorizado (OCA) de la delegación de Industria no verificó el estado de la grúa antes de su montaje. «Es un paso obligatorio y no se dio», dijo el secretario de Organización de Construcción de UGT.
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