Los responsables de la compañía, para quienes el fiscal pide 15 años de cárcel, quitaron las medidas de seguridad de la fábrica, donde una mujer quedó aplastada por una máquina.
Los seis máximos dirigentes de una empresa dedicada a la manipulación y envasado de frutas y situada en el término municipal de Cieza tendrán que sentarse próximamente en el banquillo de los acusados de un juzgado de lo penal de Murcia a responder de los delitos que les imputa el Ministerio Fiscal, quien les considera responsables de un delito contra los derechos de los trabajadores y de otro de lesiones por imprudencia, ya que una de las obreras fue aplastada por una de las máquinas de la empresa. Según las conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal, a las que ha tenido acceso esta redacción, los procesados desconectaron intencionadamente los mecanismos de seguridad de la máquina en la que se accidentó la obrera con el fin de realizar el trabajo con mayor rapidez.
Las penas que pide que se impongan a los procesados superan los quince años de prisión. En concreto solicita cuatro años de cárcel para P. M. M., gerente y socio de la empresa; dos años y medio para F. M. M. (socio y apoderado), para J. J. M. M. (socio y administrador) y para E. S. V. (jefe de administración; y un año y diez meses para F. J. C. A., que ejercía de delegado de prevención de riesgos laborales, y para J. C. J., que tenía la función de encargado de almacén.
Según las conclusiones provisionales del fiscal, la mercantil había adquirido en septiembre del año 2000 una máquina flejadora (utilizada en el embalaje de grandes paquetes y palés), que estaba dotada de un sistema de rayos infrarrojos que hacía que se detuviera cuando detectaba la presencia de alguna persona en sus inmediaciones. Estas interrupciones no gustaron a los empresarios, que desconectaron el sistema para realizar el trabajo con mayor rapidez, siempre de acuerdo con el Ministerio Público, que indica asimismo que se suprimieron otros sistemas de seguridad, como las señales de alarma de la maquinaria.
Con esta situación, en noviembre de 2001, una de las trabajadoras manejaba la citada máquina cuando ésta se detuvo. Entonces vinieron otras obreras a comprobar qué ocurría. Fue en ese momento cuando un bloque móvil de la máquina cayó rápidamente atrapando debajo a una de las mujeres.
El golpe fue tal que la víctima sufrió traumatismo craneal y la rotura de más de seis huesos, entre ellos varias vértebras. La mujer no se ha recuperado de sus lesiones y le han quedado numerosas secuelas como la falta de movilidad en una rodilla y una cadera.
Este contenido ha sido publicado en la sección Noticias de Prevención de Riesgos Laborales en Prevention world.
