El sindicato asegura que la administración está incumpliendo la normativa de Prevención de Riesgos Laborales, ya que los 20 empleaodos del centro trabajan en unas instalaciones de apenas 80 m2 , entre archivos, mesas de atención al público y sin capacidad de poder ofrecer ningún tipo de intimidad a los usuarios.
Además, mantienen que este incumplimiento “continuo y reiterado” tambián afecta a los usuarios, que son atendidos en condiciones infrahumanas. La situación se ha agravado en los últimos meses debido al aumento de casi el 100% de las demandas, lo que ya ha provocado demoras, enfrentamientos, quejas e insultos.
La tensión a la que los empleados están sometidos diariamente es tan alta que se está produciendo un alto índice de absentismo por estrés, lo que provoca aún más problemas al haber menos efectivos.
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