Un trabajador de 54 años, con iniciales O.P.S., resultó herido leve en un nuevo accidente laboral ocurrido en las obras del puerto exterior, y que ha desembocado en que la Inspección de Trabajo ordenase la paralización de la actividad en la zona del siniestro.
Los hechos ocurrieron poco antes de las doce de la noche del lunes. El operario manejaba una pala de empuje, una máquina que tiene la misión de arrojar al mar los áridos que depositan los camiones, en este caso en una explanada situada en la zona de relleno del dique, pero protegida del oleaje.
Según los primeros informes, el terreno cedió y la pala se cayó al mar, pero el obrero tuvo los reflejos suficientes para saltar antes de llegar al agua. Así, y aunque acabó en el mar, el trabajador pudo salir utilizando el aro salvavidas de la pala y gracias también a la ayuda de otro operario que se encontraba en la zona.
El plan de emergencia interior de la obra se activó de inmediato y O.P.S., que pertenece a la empresa leonesa Percasa, fue trasladado por una ambulancia al hospital Juan Canalejo. Sufre pequeñas lesiones en un hombro y una pierna, y recibió el alta hospitalaria ayer por la mañana, aunque aún estará unos días de baja laboral.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Macario Fernández-Alonso, convocó una reunión de urgencia de la mesa de seguridad de la dársena exterior, que se celebró por la tarde con la asistencia de los máximos responsables del Puerto y de UTE Langosteira, así como de los representantes sindicales, donde se analizó lo sucedido.
Las obras del puerto exterior han registrado varios accidentes desde su comienzo en marzo del 2005, con el balance de cuatro trabajadores muertos. Tras el último siniestro, registrado el 27 de noviembre del año pasado, parte de los trabajos estuvieron paralizados hasta que se elaboró un nuevo plan de seguridad.
Lo mismo había ocurrido en el anterior accidente mortal y ha vuelto a suceder ayer. Aunque la Autoridad Portuaria califica el siniestro como leve, al tratarse de pequeñas lesiones, la Inspección de Trabajo decretó el cese de la actividad en la citada zona de relleno, hasta que la UTE presente un informe con las causas del accidente y las medidas que se adoptarán para que no vuelva a pasar. En el resto del recinto, las obras pueden continuar.
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