La carta critica el “sucesivo incumplimiento” del convenio colectivo, especialmente en lo que se refiere a los protocolos de salud laboral y horario. Si no se satisfacen sus exigencias, el conflicto podría derivar en “paradas parciales o totales”.
Pese al accidente que acabó con la vida de un trabajador el pasado febrero, siguen registrándose irregularidades en algunos contenedores. “No abren o no cierran, o quedan a medio cerrar, situación que puede provocar algún susto para los viandantes”, alerta el escrito.
“Tenemos la impresión de que todo el tema relacionado con la prevención de riesgos y nuestra seguridad y salud laboral es de nula importancia para la empresa”.
A este respecto, el comité recuerda que todavía no se han aclarado las causas de la muerte de A.A.G. ni se han cumplido los acuerdos adoptados a raíz del siniestro.
La plantilla tampoco está conforme con su horario. El cambio de turnos se produce de forma “continua” debido a la “escasez” de personal en algunas franjas, advierte la carta. El déficit de empleados provoca que “haya maquinaria inmovilizada durante meses y alguna que no se ha utilizado desde su compra”.
Tal es el caso de la barredora, que según el comité tendría que funcionar de noche y hace meses que no sale, y la motocasa (que se usa muy esporádicamente).
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