La Fiscalía de Málaga ha decidido recurrir los autos de archivo dictados por distintos juzgados durante este mes de junio sobre cinco casos de accidentes laborales. El Ministerio Público quiere que se cite a declarar a los trabajadores víctimas de estos accidentes y que la Inspección de Trabajo compruebe si se infringieron las normas de prevención de riesgos laborales.
Durante el presente mes los juzgados han decretado el archivo de cinco casos de accidentes laborales, tras recibir los partes médicos de las lesiones que remiten los centros sanitarios a los jueces. Antonio Morales, fiscal coordinador de riesgos laborales, explica que «desde la Fiscalía hemos decidido aplicar una unidad de criterio sobre estos asuntos de modo que cada vez que se produzca un auto de archivo el fiscal correspondiente recurra la decisión judicial para que se investigue cada caso». De esta forma lo que se quiere es investigar si detrás de un accidente laboral existió dejación o infracción de las normas de prevención de riesgos laborales.
Morales señala que en los cinco casos cuyo archivo ha sido recurrido «hemos pedido que se tome declaración a la víctima del accidente y que se traslade el caso a la Inspección de Trabajo para que lo investigue». «Creemos -añade- que la siniestralidad laboral es un problema muy grave, que el año pasado dejó en Málaga 16 víctimas mortales, que hay que perseguir y, por supuesto prevenir tomando todas las medidas necesarias».
Cinco personas murieron cada día como consecuencia de un accidente laboral en los casi un millón de siniestros que se produjeron en el año 2000 en España. Durante el pasado ejercicio, la siniestralidad laboral aumentó un 11% por ciento en Andalucía, donde se contabilizaron 139.000 accidentes laborales con bajas por lesiones, 2.650 con heridos graves y se registraron 148 víctimas mortales. En Málaga y provincia las cifras de siniestralidad también fueron muy altas: 16 víctimas mortales, 700 heridos graves y 27.400 accidentados que precisaron bajas laborales.
La mayoría de los accidente laborales se produjeron en empresas pequeñas y de tamaño medio. Así de cada tres accidentes mortales uno se produjo en empresas con menos de cinco trabajadores, mientras que el 75% de los siniestros se registraron en empresas con menos de 50 empleados. Durante pasado año la Inspección de Trabajo levantó un total de 1.232 actas a distintas empresas e impuso sanciones por un total de 770 millones de pesetas.
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