Una explosión por causas fortuitas ha sobresaltado la Clínica La Milagrosa de Madrid, donde está ingresado el Rey recuperándose de una operación de hernia discal. La explosión se ha producido al estallar un depósito de oxígeno, situado en la planta baja del centro hospitalario, según fuentes del Ministerior del Interior, que ha descartado un atentado. El incendio se ha declarado en la esquina opuesta a la de la habitación de Juan Carlos.
La Casa del Rey ha confirmado que el Monarca se encuentra bien, que está totalmente fuera de peligro y que no ha sido trasladado de habitación en ningún momento. En un inicio, la policía ha valorado la opción de trasladarle a otro centro, pero Zarzuela ha neutralizado cualquier movimiento.
Cinco personas han resultado heridas, entre ellas dos bomberos, por inhalación de humo y por quemaduras de vapor de agua.
Algunos testimonios han manifestado que habían oído dos fuertes explosiones, lo que coincide con la versión que un portavoz de la policía ha ofrecido a este periódico, según la que la explosión de dos bombonas habría provocado el incendio.
Los servicios de emergencia han desalojadoa unos pocos pacientes del centro, según ha informado Zarzuela. Cinco pacientes ingresados en la unidad de cuidados intensivos han sido trasladados de hospital ante el temor de que los conductos de aire se hubieran contaminado con el humo.
La Casa del Rey mantiene sus previsiones iniciales de dar a conocer el nuevo parte médico sobre la salud del Monarca.
Al lugar del incendio han acudido cinco dotaciones de los bomberos de Madrid y unidades del Samur, que están atendiendo a algunas personas afectadas por el humo y por crisis nerviosas. El tráfico ha sido cortado en la calle Modesto Lafuente, donde se encuentra la clínica.
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