El retraso en el comienzo de algunas obras está estrechamente relacionado con las dificultades que algunas empresas encuentran para aprobar el plan de seguridad y salud, que desde hace poco tiempo es obligatorio, según ha sabido este periódico de fuentes municipales. En algunos casos las exigencias del funcionario de turno impide que prospere este documento, condición que desde que se exige, desde el año pasado, está retrasando en exceso los trabajos del plan de obras y servicios. En algunos casos no es sólo este plan el inconveniente, también lo es el acta de replanteo.
Por ley las obras deben de iniciarse dos meses después de la firma del contrato, uno a cuenta del plan de seguridad y salud y otro por el acta de replanteo. Resalta la demora porque la mayoría de las obras están ya acabadas y algunas están a punto de concluir, como son los proyectos de iluminación del barrio de Los Barreros, junto al local de la Tercera Edad, o de Torreciega, junto a las casas próximas a El Zamorano.
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