El colectivo de autónomos sufrió 241 accidentes mortales en 2003, concentrándose la mitad de ellos en el sector del transporte, esta cifra arroja un descenso del 30 por ciento respecto a las muertes registradas en 2002. Además, el pasado año padecieron 150.843 accidentes laborales, disminuyendo así en un 23 por ciento respecto a 2002, según datos recogidos del Gabinete de Estudios de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA).
Entre las comunidades autónomas que presentan el índice de siniestralidad más elevado de este colectivo figura Cataluña, que registró 29.145 accidentes laborales, Andalucía con 20.260 y Madrid (16.587). Por contra, La Rioja fue la autonomía en la que menos siniestros se registraron con 1.289, seguida por Cantabria (1.461) y Navarra (2.466).
Transporte y contrucción
Tras el sector del transporte, la construcción y servicios profesionales es el que más accidentes mortales registró con el 30 por ciento, un total de 73 siniestros. Otros 14 de estos accidentes se localizaron en el sector de la industria (5,8 por ciento del total); en extracción y movimientos 12 siniestros (4,9 por ciento); otros 11 víctimas mortales trabajaban en el sector de agricultura, ganadería y pesca (4,5 por ciento); y le siguen los sectores de Comercio y Hostelería.
Sin embargo, en lo que concierne a accidentes laborales una cuarta parte se registraron en la construcción y servicios profesionales, con 39.068 siniestros en 2003. Le siguen el sector de comercio que arroja 20.484 accidentes; un total de 19.006 autónomos dedicados a labores de transporte sufrieron también algún tipo de accidente, y lo propio padecieron también 17.754 personas de este colectivo en el sector de industria.
Entre 36 y 54 años
Los autónomos de edades comprendidas entre los 36 a 54 años fueron los más castigados por la siniestralidad laboral. Así, el 51,8 por ciento de los accidentes mortales los padecieron trabajadores de esta horquilla de edad, mientras que se eleva hasta 52,2 por ciento en accidentes laborales.
El siguiente grupo de edad con más riesgos es de los mayores de 55 años, ya que registra el 33,7 por ciento de los accidentes laborales y el 31,9 pro ciento los mortales. Los autónomos menores de 35 años sufrieron el 14,1 pro ciento de los accidentes laborales y registraron el 16,3 por ciento de los mortales.
Si se atiende a razones de sexo, los hombres concentran la mayor parte de estos siniestros. En el 89,2 por ciento de los casos de mortalidad laboral eran hombres, frente al 10,8 por ciento de mujeres. En el índice de accidentes laborales se reduce este diferencial, aunque se mantiene todavía bastante distanciado, ya que del total de accidentes en el 26,6 por ciento de los casos se trató de féminas.
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