El centro médico Osakin de Andoain ofrecerá una novedosa técnica para la prevención y tratamiento de problemas de espalda: la mesa de tracción lumbar DRX-9000, una técnica no quirúrgica que ha conseguido resultados satisfactorios en un 86% de los casos tratados. Imanol Vega, traumatólogo que desarrolla su actividad en el marco de la patología de la columna vertebral, ofrecerá este viernes, a las 7 de la tarde, en el auditorio de Bastero una charla sobre actualización en la prevención y tratamiento del dolor lumbar en la que explicará las técnicas y el equipamiento que este nuevo centro aplicará en la prevención y el tratamiento de los dolores de espalda.
Vega señala que las encuestas vascas de salud de los años 1994, 1997 y 2002 confirman que el dolor lumbar es para los vascos el problema crónico de salud más frecuente. Añade que un 5,6% de los habitantes de la CAPV considera que sufre dolor crónico de espalda, mientras que un 30% de la población ha padecido dolor lumbar en el último año. El gasto generado sólo por el dolor lumbar en Euskadi supuso al menos un 0,6% del PIB de la Comunidad Autónoma Vasca durante el año 2000. El coste social, personal y familiar, asegura Vega, es incalculable.
El dolor lumbar suele resolverse normalmente en un plazo de dos a tres semanas en la mayoría de los casos y generalmente se debe a sobrecargas, esfuerzos y malas posturas. Cuando estos hábitos posturales, laborales y deportivos no se corrigen de forma constante y diaria es frecuente que aparezcan nuevos episodios, que cada vez serán más intensos y duraderos, según explica este traumatçologo. Por ello, la cronificación estimada en un 5% de la población general requiere un tratamiento preventivo.
Imanol Vega considera que uno de los problemas más frecuentes es la enfermedad degenerativa discal o la hernia discal «sobretratada a menudo por las alarmantes imágenes de la Resonancia Nuclear Magnética» Vega afir- ma que su lema es «no tratar imágenes sino pacientes y síntomas».
La enfermedad degenerativa afecta a pacientes en edad laboral que demandan cada vez más soluciones poco agresivas y definitivas. Vega apunta que la cirugía de la enfermedad discal en términos genéricos tiene un porcentaje de éxito entre el 70 y 75%, pero que pasa factura en unos 7-10 años en función de la actividad del paciente y de la constancia en el cumplimiento de las normas posturales, deportivas y laborales. Huyendo de la cirugía, Vega señala que muchos afectados recurren a terapias alternativas como masajistas y quiroprácticos que «aunque no resuelven el problema en los casos más graves, alivian la mayor parte de los dolores en la mayoría de los pacientes y evitan o retrasan un número indeterminado de cirugías».
Imanol Vega destaca que el centro médico Osakin ofrece a los pacientes técnicas poco agresivas para el tratamiento del dolor lumbar: escuela de espalda, electroterapia, radiofrecuencia y electroterapia intradiscal, lavado epidural, bloqueo facetario, riziolisis…, incluyendo las denominadas mesas de descompresión lumbar mecanizada recién importada desde Estados Unidos.
Entre estas técnicas la descompresión inradiscal que aplica el centro Osakin está indicada para algunas hernias discales, discopatías degenerativas, síndromes facetarios y dolor residual postquirúrgico, entre otras. La mesa DRX-9000 se basa en el método clásico de tracción recuperado de la tecnología moderna: no tracciona sino que descomprime los discos y las pequeñas articulaciones facetarias de forma progresiva y totalmente indolora, y permite recuperar la altura discal en torno a los 4-7 milímetros. Como efecto los discos lumbares pueden regenerarse por absorción de agua y nutrientes.
Imanol Vega asegura que 20 sesiones de 30 minutos son suficientes para lograr reducir y hacer desaparecer el dolor de tipo muscular, ciático, facetario o discogénico con u porcentaje de éxito de hasta el 86% y con menos del 4% de recaídas al año. Además, añade Vega, este tratamiento no cierra puertas a otras técnicas y se puede repetir en caso de necesidad.
El traumatólogo del nuevo centro Osakin recomienda acudir al médico cuando hay dolor lumbar o dorsal en personas jóvenes (menores de 25 años), dolor por la pierna que no cede en las primeras tres semanas, pérdida de fuerza en brazos o piernas, presencia de zonas acorchadas o dormidas en brazos o piernas, problemas para orinar o defecar, dolor de predominio nocturno y que interfiere con el sueño, y síntomas como fiebre, pérdida de pesa o cansancio.
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