El número de accidentes laborales en Castilla y León el año pasado descendió algo más de un 7%, pero aumentaron los siniestros mortales en un 35,21% respecto al año anterior, con un total de 96, frente a los 71 del 2007. Los datos, facilitados por el sindicato Comisiones Obreras, incluyen los siniestros in itinere, que son precisamente los que más incrementan el porcentaje: 26 víctimas mortales en desplazamientos al puesto de trabajo, un 73% más que el año anterior, cuando hubo 15.
La siniestralidad con víctimas mortales se mantiene en los sectores agrario, con seis fallecidos el año pasado, el mismo número que el anterior, y en construcción, que con 24 fallecidos en el 2007 y otros 24 el año pasado sigue siendo el sector con más accidentes mortales después de los que se producen in itinere.
En industria, donde descendió el número de accidentes leves y graves, se registro, sin embargo, un alarmante aumento de muertes, el 100%. 18 trabajadores fallecieron, frente a los 9 del período anterior, y en servicios hubo 22 muertes, frente a las 17 del año anterior, lo que supone un aumento del 29,41%.
Son datos del año pasado ya que, según la queja de los sindicatos, no se han dado a conocer las cifras de éste. CC.OO. tampoco ha facilitado datos correspondientes a la provincia, aunque sí se sabe que el número de accidentes, sólo de enero a noviembre, fue de 2.463, frente a los 2.960 que se produjeron a lo largo de todo el año anterior. Zamora es, además, una de las provincias, junto con Ávila, en la que hay mayor proporción de muertes en accidentes in itinere. En el 2007 hubo 168 accidentes en desplazamientos laborales con tres fallecidos y siete heridos graves, y el año pasado, hasta noviembre, se habían producido 142 accidentes con un fallecido y un herido grave.
Los responsables de salud laboral de comisiones afirmaron ayer que el hecho de que haya menos actividad a causa de la crisis no significa que se produzcan menos accidentes, como señaló Mariano Sanz, secretario regional de salud laboral, quien añadió que en la segunda mitad del año 2008 ya se empezó a notar la crisis, y sin embargo aumentaban las cifras de siniestralidad.
Sanz subrayó que crisis y descenso de la actividad no suponen menos accidentes; «lo que está directamente relacionado con el descenso de los accidentes es la inversión en planes de prevención, de seguridad, en formación y con hacer bien las cosas». Declaró que ante una situación económica difícil se aplican recortes y donde primero se recorta es en seguridad.
El sindicalista denunció, además, que la crisis influye también en que los trabajadores reclamen menos en cuanto a seguridad, «porque tienen miedo a perder su trabajo».
Mariano Sanz hizo estas declaraciones con motivo de la clausura de la campaña de este curso sobre prevención de riesgos, destinada a escolares y que la secretaría de salud laboral de CC.OO. desarrolla desde hace 15 años.
En esta edición el programa ha llegado a 878 alumnos de la provincia, de un total de 16 centros, 10 del ámbito rural y otros seis del núcleo urbano. La última de las actividades se celebró en el colegio La Hispanidad de la capital.
En Castilla y León han participado 7.534 alumnos, cuando el programa todavía no se ha cerrado en provincias como Ávila Palencia o León. En la campaña, titulada Kuy Dao se aborda la prevención de riesgos con una nueva perspectiva y enfocada a los escolares, «puesto que los trabajadores del futuro son los escolares de hoy», y puesto que hay situaciones en la vida cotidiana que suponen riesgos que también aparecen luego en el puesto de trabajo, explicó Mariano Sanz.
El objetivo de la campaña es sensibilizar a los más jóvenes sobre los riesgos en general, facilitar que adquieran hábitos de prevención de riesgos laborales, «que, en definitiva, es aplicar el sentido común».
Con el programa se pretende también que las pautas que se dan a los alumnos para que adquieran «una cultura preventiva», las lleven a casa y «les expliquen a sus padres que los riesgos laborales son parecidos a los que puede haber en cualquier vivienda».
A la presentación del balance del programa asistieron también Javier Mielgo, técnico de prevención de la campaña, y Manuel Prieto Velázquez, secretario de Salud laboral del sindicato en Zamora.
La campaña se desarrolla con el apoyo de la comunidad educativa, y cuenta con la colaboración de las consejerías de Educación y empleo, que financian el material escolar con el que se trabaja.
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