El Sector Nacional de Justicia de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF) ha puesto en marcha una campaña contra el mobbing, o lo que es lo mismo: el acoso psicológico en el trabajo, hostigamiento laboral o psicoterror. Esta campaña tiene por objetivo que las víctimas del acoso laboral (normalmente profesionales brillantes que despiertan admiración entre sus compañeros) denuncien la sucesión de episodios de maltrato psicológico en el ambiente laboral por parte de una persona (habitualmente un superior jerárquico) o varias, durante un período continuado. El sindicato informa sobre sus repercusiones en la salud.
Los expertos tienen registradas hasta 45 formas distintas de ejercer el hostigamiento, que pueden ir desde no hablar a la víctima, no adjudicarle trabajo o darle más del que puede realizar, hasta ridiculizar su aspecto o hacer circular calumnias sobre su vida profesional o privada. Pero para que un comportamiento de agresión psicológica sea considerado mobbing requiere que el acosador (el jefe o un compañero con poder en la empresa) siga una pauta concreta: lanzan ataques directos (critican el trabajo del acosador injustificadamente) y, sobre todo, indirectos (hablan mal en el ámbito profesional o personal).
Según el CSI-CSIF, la Administración y las empresas públicas son territorios proclives a la aparición del acoso laboral. Ante una situación de mobbing se recomienda notificarlo al delegado de Prevención de Riesgos Laborales y interponer una denuncia ante los Servicios de Salud Laboral. Más información: www.csi-csif.es/justicia o .
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