Bilbao acogerá el próximo jueves, día 3, las III Jornadas de Formación en Seguridad Minera en Canteras, Graveras y Plantas de Tratamiento de Aridos, organizadas por la Asociación Nacional Española de Fabricantes de Aridos (ANEFA) y subvencionadas por la Dirección General de Política Energética y Minas del Ministerio de Economía, en el marco del Plan de Seguridad Minera.
El certamen se desarrollará a partir de las diez de la mañana en el Hotel Indautxu de Bilbao en el marco de la campaña de ANEFA que, bajo el lema “Trabaja con seguridad”, tiene por objeto concienciar a empresarios, trabajadores y técnicos sobre la necesidad de integrar las medidas de prevención de accidentes en todas las operaciones. Las jornadas están abiertas a todos los empresarios y profesionales relacionados con el sector extractivo y culminarán con una mesa redonda-coloquio donde se debatirán los distintos aspectos tratados.
El nuevo ciclo, que completa los 21 encuentros celebrados en años anteriores, se impartirá a lo largo de este año en distintas ciudades españolas, elegidas prioritariamente por su proximidad a núcleos importantes de producción minera- Valencia, Alicante, Santander, Bilbao, Pamplona, Granada, Sevilla, Madrid, Toledo y Tarragona. Según informó la organización en una nota de prensa, ANEFA pretende mostrar a la sociedad “el importante avance del sector de los áridos en el campo del desarrollo sostenible, es decir, en los ámbitos de la salud, la seguridad de los trabajadores -apartado en el que se enmarcan estas jornadas-, la calidad de los productos y el medio ambiente.
El sector de áridos, cuya materia prima se extrae de explotaciones mineras denominadas canteras y graveras, dispone en Euskadi de 36 explotaciones, que dan empleo directo a unos 590 trabajadores e indirecto a unos 3.560, para un consumo total de 16,9 millones de toneladas para la construcción y usos industriales y un volumen de negocio anual de aproximadamente 86,53 millones de euros, en el seno de una estructura y organización empresarial muy diversificadas.
Los áridos, la segunda materia prima más consumida por el hombre tras el agua, son materiales insustituibles para la construcción y las obras públicas ya que constituyen el elemento básico de hormigones, morteros y prefabricados en la edificación; de las bases, subbases y aglomerados asfálticos en carreteras; y del balasto de las vías de ferrocarril, además de otros usos importantes como escolleras o micronizados.
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