Ocho delegados territoriales comenzarán a trabajar en breve en Asturias para reforzar la prevención de riesgos laborales en las empresas, sobre todo en las de pequeño y mediano tamaño. Así lo acordaron ayer los responsables sindicales de UGT y CCOO, Justo Rodríguez Braga y Alberto Rubio, con el presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), Severino García Vigón, en un acto en Oviedo que sirvió para sellar el convenio para la creación de esta nueva figura laboral.
Los ocho delegados territoriales, que dependerán del Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales, gozarán de unas competencias “pioneras en España”, según destacó Alberto Rubio. En concreto, tendrán la potestad para visitar los lugares de trabajo para ejercer labores de vigilancia y supervisión y podrán recabar del empresario la adopción de medidas preventivas. Además, podrán recomendar la suspensión de trabajos que supongan riesgos graves e inminentes para la vida y la salud de los empleados.
Según se recoge en el convenio firmado por sindicatos y patronal, el ámbito de actuación de estos delegados serán las empresas asturianas, “con especial atención a las pequeñas y las microempresas”. De los ocho delegados, cuatro corresponden a la FADE y otros cuatro a los sindicatos, repartidos de forma equitativa entre CCOO y UGT. Al margen quedarían aquellos centros de trabajo que dispongan de delegados sectoriales de prevención.
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