Un trabajador falleció electrocutado a las tres de la tarde, en el arcén de la carretera Aspe-La Romana, cuando se encontraba en la cesta elevada de un camión-grúa instalando sobre un poste metálico un panel publicitario en forma de bandera.
El accidente laboral se produjo a cuatro kilómetros del casco urbano de Aspe, en los accesos a la urbanización Mirador de Alcaná. El fallecido, E.J.M.F., de 31 años de edad y vecino de Torrevieja, sufrió una fuerte descarga eléctrica, al parecer, al entrar en contacto con un cable de alta tensión que le hizo salir despedido de la cesta cayendo sobre la plataforma del camión desde varios metros de altura. También se baraja la hipótesis de que se produjera un “aro eléctrico” o que alguna conducción eléctrica estuviera en contacto con el poste metálico donde pretendían colocar la banderola publicitaria.
En el momento de la descarga se encontraba junto a él otro compañero de la misma empresa, que salvó milagrosamente la vida y fue quien le prestó los primeros auxilios. Al lugar llegó en un primer momento una ambulancia de la Cruz Roja de Aspe cuyos voluntarios trataron de reanimar sus constates vitales. Minutos después hizo acto de presencia la unidad móvil del Samu. Los intentos por salvar la vida al trabajador, tarea a la que también se sumó el personal sanitario del centro de salud de Aspe, resultaron inútiles. También acudieron a la zona miembros de la Policía Local y Guardia Civil.
Momentos especialmente desgarradores se vivieron cuando la mujer del fallecido y el hijo de ambos, con tres años recién cumplidos, acudieron al lugar del accidente desde Torrevieja.
Las reacciones del sindicato UGT-PV no se hicieron esperar y sus dirigentes autonómicos denunciaban horas después que, “de nuevo, la ausencia de medidas de prevención en materia de riesgos laborales ha ocasionado la muerte de un joven trabajador”. Además de lamentar la pérdida y mostrar sus condolencias a los familiares y allegados de la víctima, la central dijo de este caso que “es obvio que no se han respetado las más elementales medidas de seguridad destinadas a garantizar la protección de este obrero frente al riesgo eléctrico”. Sobre esta cuestión la legislación vigente señala que deberán tenerse particularmente en cuenta las características conductoras del lugar de trabajo y que toda tarea que conlleve un riesgo eléctrico deberá efectuarse sin tensión, una cuestión que para UGT “resulta del todo claro que se ha incumplido”. Por su parte el responsable comarcal del sindicato en La Muntanya-Valle del Vinalopó, Vicente Prieto, ha exigido a la Administración que aumente la inspección y vigilancia de los infractores al tiempo que ha reincidido en que “formación es igual a prevención”.
Ya son dos los trabajadores que pierden la vida en lo que va de año en el Medio Vinalopó. La primera víctima fue un albañil de 56 años, vecino de Novelda, que murió el 4 de enero tras caer de una obra en construcción en Monforte del Cid.
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