La Sala de lo Social ha desestimado el recurso que el Instituto Nacional de la Seguridad Social presentó contra la sentencia de un Juzgado que declaró la incapacidad absoluta de una administradora de empresas porque el trastorno bipolar que padece afecta a su trabajo.
La sentencia confirma así la dictada por un Juzgado de lo Social de Murcia, que, en marzo de 2013, estimó la demanda de esta trabajadora autónoma y la declaró en situación de invalidez permanente en grado de absoluta, con origen en enfermedad común. El juez determinó también que el INSS debía abonarle una pensión mensual vitalicia del cien por ciento de la base reguladora.
La sentencia señalaba que esta trabajadora fue diagnosticada de trastorno bipolar y que desde el año 2003 está en tratamiento psicofarmacológico, presentando también déficit de atención, con una personalidad dependiente e inestable.
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