Los 2,7 millones de trabajadores por cuenta propia afiliados a la Seguridad Social tendrán que esperar unos meses para cobrar la prestación de incapacidad temporal (IT) a partir del cuarto día de estar de baja por enfermedad, según informó ayer el portavoz de la Plataforma Nacional Permanente de Autónomos (ATA), Lorenzo Amor. Si estará cubierta la incapacidad permanente total. Sus explicaciones tuvieron lugar después de una reunión mantenida en el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales con el secretario de Estado para la Seguridad Social, Gerardo Camps, y el secretario general de Empleo, Juan Chozas.
Por el contrario, a partir del próximo 1 de enero, el colectivo sí tendrá cubierta la incapacidad permanente total cualificada para los mayores de 55 años y los riesgos profesionales (enfermedad profesional y accidente de trabajo).
No obstante, para esta segunda prestación se han establecido requisitos. Las normas consisten básicamente en que para conseguir una mayor prestación el trabajador tendrá que aumentar sus aportaciones. Ahora bien, al derecho a los riesgos profesionales sólo se podrá acceder si el autónomo cotiza también por incapacidad temporal.
El Ministerio también está dispuesto a incrementar la prevención de riesgos laborales entre este colectivo de trabajadores con planes de salud laboral. Asimismo, Camps y Chozas aseguraron -siempre según Amor que los autónomos estarán más presentes en los planes anuales de empleo, que elabora el Ejecutivo para presentar en la Unión Europea (UE).
Amor señaló que el Gobierno no está dispuesto a que el cobro de la enfermedad común al cuarto día (en lugar de al decimoquinto como ocurre en la actualidad) se introduzca en la Ley de Presupuestos vía enmienda. «Su aplicación se realizará a lo largo del 2003, posiblemente en mayo, bien por Decreto o bien por proyecto de Ley impulsado por el Ministerio de Trabajo», dijo. Al tiempo que acusó a CEOE y CEPYME de presionar al Ejecutivo para que retrase la medida. ATA ha propuesto que la ampliación de la IT se aplique mediante una cotización adicional no superior al 2% de la base de cotización.
Además, el Gobierno estudiará a lo largo del 2003 la reforma de las reglas que rigen la contratación de familiares hasta segundo grado de consanguinidad. Igualmente baraja para llevar a cabo en la presente legislatura mejoras para los jóvenes y nuevos autónomos, como es la posibilidad de tener una base de cotización similar al salario mínimo interprofesional. En la actualidad, la base mínima de cotización de los trabajadores por cuenta propia es de 740 euros y si prospera la medida analizada se bajará a 550 euros.
En cuanto a la puerta que ha abierto el Parlamento para que los autónomos cobren el desempleo, Amor añadió que no ve al Ejecutivo demasiado convencido de poner en práctica la iniciativa. «Esto me ha desilusionado un poquito», señaló.
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