El descenso de los accidentes laborales se ha consolidado este año en Catalunya después de un 2002 negro que hizo retroceder a la comunidad a los niveles de 1992. En el periodo de enero a septiembre, las muertes de trabajadores en accidentes laborales bajaron un 24% y se situaron en el nivel más bajo desde 1996.
La curva mensual de la siniestralidad laboral muestra un claro descenso desde el inicio de este año, coincidiendo con el incremento de la presión social para exigir el cumplimiento de la ley de prevención de riesgos laborales. En los tres primeros trimestres del 2003 perecieron en accidentes de trabajo un total de 107 personas, 34 menos que en los mismos meses del ejercicio anterior.
En ese periodo de tiempo no se alcanzaba un resultado más bajo desde 1996, cuando hubo 102 muertes. El descenso en Catalunya supera con creces el registrado en el conjunto de España, que fue del 14% de enero a julio al pasar de 687 fallecidos en el 2002 a 589 este ejercicio.
La construcción tuvo un papel importante tanto en la subida del 2002 como en el descenso de este año. En los primeros tres trimestres, los fallecidos descendieron el 21,4%. El mayor control en la construcción pública ha sido decisivo, según la gerente del servicio de prevención del Institut Gaudí de la Construcción, Gemma Carol. La presión social, el endurecimiento de las inspecciones y una mayor sensibilización de los empresarios ha beneficiado, según Carol, que la prevención se aplique en la gestión interna diaria de un mayor número de compañías que no se limitan a cumplir formalmente la ley con un plan.
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