Más de la mitad de los nuevos puestos de trabajo creados por la Unión Europea son ocupados por mujeres

Aunque la tasa de ocupación femenina sigue registrando niveles inferiores a la de los hombres, 52,5% frente al 71,5% en 1999, el mercado laboral de la Unión Europea se está feminizando a marchas forzadas, según se desprende del informe anual de la Comisión Europea.En 1999, el 70% de los nuevos puestos de trabajo han sido ocupados por mujeres. Una tendencia que se mantuvo el año pasado, aunque menos pronunciada, al ocupar el sexo femenino más del 50% de los empleos creados.

Las mujeres son, por lo tanto, consideradas como el «motor de la creación de empleo». Esta evolución desembocó en una disminución de dos puntos en el diferencial de tasas de empleo entre los dos sexos en el periodo comprendido entre 1995 y el año 2000.

Una evolución que se remonta a 1994, ya que el 85% de los empleos creados hasta 1999 fueron ocupados por mujeres. Esta tendencia es mucho más marcada en países donde la tasa de empleo femenina era más baja. Tanto Grecia como España o Irlanda registraron tasas de crecimiento del empleo femenino comprendido entre el 5% y el 7%.

En total se crearon cerca de tres millones de puestos de trabajo en el conjunto de la Unión a lo largo del año pasado. Un crecimiento del 1,8%, que supera al 1,6% registrado en 1999. Este aumento elevó la tasa total de empleo al 63,3%, frente al 62,3% en 1999 y al 61,4% en 1998. En los tres últimos años se crearon en total unos cuatro millones de empleos. Con este nuevo dinamismo del mercado laboral ya no se puede hablar de europesimismo» término usual para describir previamente a 1997 la situación laboral de la UE.

Con esta expansión significativa del empleo a lo largo de los últimos tres años el número de personas que encontró un trabajo en la UE alcanzó cerca de siete millones de personas desde 1994, un aumento del 4,5%. Si se compara con la situación registrada en la recesión de 1991, el número de personas empleadas se incrementó en 2,5 millones.

Pero, a pesar del buen comportamiento del mercado laboral comunitario, el desempleo sigue superando los niveles registrados en Estados Unidos o en Japón. En 1999, tercer año consecutivo en el que se registra un descenso del paro, el 9,2% de la población activa comunitaria estaba desempleada frente al 11,1% en 1994. En agosto del año pasado el paro alcanzó incluso el 8,3% de la población activa. Una tasa que sigue superando con creces la registrada en EEUU -un 4,3%- (frente al 7,5% de mediados de 1992), o en Japón, donde a pesar de una tendencia al alza el desempleo se sitúa en el 4,5%.

Es verdad que en febrero de 1994 los desempleados sumaban 18,7 millones de personas, una cifra que superaba la población total de Holanda (15 millones de habitantes). En agosto del año pasado ya sólo eran 14,3 millones de personas. Desde 1994, los parados han copado la mitad de los nuevos puestos de trabajo. Pero incluso con esta mejora significativa el número de parados superaba en dos millones de personas a la registrada en 1991.

Para que la Unión logre los objetivos consensuados en Lisboa (marzo de 1999), el informe considera que Alemania, Francia e Italia deben mejorar su potencial de creación de empleo. Estos tres estados deben crear cerca de la mitad de los empleos necesario para que la UE en su conjunto logre una tasa de empleo del 70%, en 2010.

Al contrario, en caso de que sus mercados laborales mantengan el mismo comportamiento que el que registraron en la década de los noventa la UE solamente conseguirá una tasa de empleo del 67%. Una evolución que contrasta con la de los países más dinámicos. Así las previsiones apuntan a que España, Irlanda y Holanda aumenten sus tasas de empleo de más del 10% a lo largo del periodo. Aunque es verdad que los dos primeros citados registraron tasas de empleo entre las más bajas de la UE.

El Mundo

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