Un trabajador marroquí de 37 años murió el martes en un accidente laboral que ocurrió en las obras de ampliación del túnel de la línea 7 que Metro de Madrid está llevando a cabo en Coslada. En el accidente, que se produjo por un impacto entre dos máquinas que realizaban la obra, resultó herido otro trabajador, esta vez de nacionalidad española, que sufrió fracturas en ambas piernas y fue trasladado con carácter leve al Hospital Universitario de La Princesa.
El sindicato indicó que el trabajador muerto, que pertenecía a una subcontrata de Dragados, la empresa encargada de la ampliación, se encontraba subido en una cesta de tijera dentro de un túnel cuando fue golpeado por un volquete dumper que transportaba materiales de escombro. El trabajador murió prácticamente en el acto como consecuencia del “tremendo” impacto que recibió en el pecho.
El empleado, que responde a las iniciales de A.S., fue atendido en un primer momento por los médicos que Metro tiene en todas las obras que realiza. A continuación, el servicio médico del Samur atendió al herido, que presentaba diversos traumatismos, y comenzó las técnicas de reanimación, sin que pudieran hacer nada por salvar su vida.
La Consejería de Transportes e Infraestructuras -cuya responsable, Elvira Rodríguez, acudió al lugar del suceso-, y la Comisión de Seguimiento de Seguridad en la que participa la empresa Madrid Infraestructuras del Transporte (Mintra), sindicatos y empresas, ha iniciado una investigación para conocer la causas de este trágico siniestro.
La Consejería, que lamentó el “trágico accidente”, aseguró que el empleado disponía de todas las medidas de seguridad, “incluyendo el arnés que impidió que se precipitara al suelo”.
Por su parte, el responsable de Salud Laboral de la Federación de Construcción de CCOO, Víctor García, acudió al lugar del suceso para conocer las circunstancias del accidente.
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