El Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) y el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Técnicos Agrícolas de España (CGCOITAE) han elaborado un estudio, a partir de las valoraciones del colectivo de autónomos, en el que se evalúan los riesgos laborales en el sector agropecuario. Este estudio se completará próximamente con otro dirigido a las condiciones de trabajo de la población trabajadora por cuenta ajena.
En un ámbito de trabajo mayoritariamente masculino, hombres y mujeres identificaron de una forma muy similar la presencia de riesgos laborales, aunque con algunos matices. En la encuesta se percibe que una gran mayoría (82%) son conscientes de los riesgos que conlleva su trabajo, riesgos provenientes de instalaciones y equipos de trabajo potencialmente peligrosos, manipulación de agentes químicos etc. Siendo más precisos, los golpes y caídas son los riesgos más frecuentemente citados. En general, la causa más común (63%) es la que se refiere a distracciones, descuidos o despistes. Más alejadas de ellas, pero también con una importante presencia, se encuentran la imprevisibilidad de los animales (25,6%) o la rapidez con la que hay que ejecutar el trabajo (17,6%).
Analizando los riesgos por tipo de producción, además de lo ya señalado, se observa que, en la producción agrícola la causa principal según los encuestados es la rapidez que exige el trabajo y el exceso del mismo sin descanso, aunque también es llamativa la referencia a la falta de protecciones de las máquinas o equipos. Estas dos primeras causas de riesgo laboral coinciden también en la producción ganadera, aunque en ésta se apunta como principal causa el peligro que puede conllevar trabajar con animales, debido a lo imprevisible de su comportamiento. Por último, en la producción combinada se ve como mayor riesgo laboral los desniveles en el terreno de trabajo.
En los últimos tres años, un 9% de los participantes en la encuesta habían sufrido algún accidente. En el último año los accidentes señalados por los encuestados (7,7%) los más frecuentes son: caídas (ya sean desde altura o al mismo nivel), daños producidos por animales (producción ganadera) y sobreesfuerzos (producción agrícola). Por su parte, las partes del cuerpo más dañadas a causa de accidentes son los miembros inferiores y superiores.
Los resultados del estudio ponen de manifiesto que el sector agropecuario es uno de los más desprotegidos a nivel laboral, ya que las causas que pueden provocar un accidente de trabajo son muy variadas.
El INSHT, considerando la ausencia a nivel nacional de información detallada y rigurosa en este sector aceptó la propuesta para la elaboración de este estudio. Gracias a sus resultados se dispone de un conocimiento más preciso de los riesgos y las condiciones de trabajo de este sector laboral, lo que permitirá que las autoridades públicas y los agentes sociales diseñen y apliquen políticas para el control de los riesgos y la mejora de sus condiciones de trabajo.
Ministerio de Trabajo e Inmigración
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